Tras la apertura de un proceso penal contra el presidente de la FIFA Gianni Infantino, la Comisión de Ética de la máxima instancia futbolística se encuentra bajo presión, ya que tiene poder para abrir una investigación al dirigente y, eventualmente, sancionarle.
Para el catedrático de derecho suizo Mark Pieth, el órgano encargado de la reforma de la justicia de la FIFA en 2011 para ganar independencia, no hay dudas: "La Comisión de Ética debe abrir una investigación", declaró a la AFP.
En esto coincide con Miguel Poiares Maduro, expresidente del comité de gobernanza de la instancia, que en el diario Le Monde declaró que "ahora, la Comisión de Ética debe hacer algo", considerando que Infantino es sospechoso de haber violado los artículos 13 y 14 del código ético de la FIFA (que se refieren a las reglas de conducta general y al deber de neutralidad).