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El FC Barcelona ha cerrado una Liga de España de pesadilla, con plantel, cuerpo técnico y directiva, cansados, irregulares y sobretodo, bajo la polémica. Tras la derrota fue Lionel Messi quien dio la cara.
El equipo parece estar en una oscuridad de la que no puede salir y a menos de un mes, deberá recibir al Napoli por los octavos de la UEFA Champions League.
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"La Pulga", tras el partido recordó sus propias palabras antes del reinicio del fútbol en España: “Como dije antes, así como estábamos jugando no nos alcanzaba para la Champions y tampoco nos ha alcanzado para LaLiga”
"Somos un equipo débil. El Madrid hizo lo suyo, pero nosotros también ayudamos a que La Liga se la lleven ellos. Tenemos que hacer la autocrítica. Somos el Barcelona y estamos obligados a ganar", ametralló el rosarino evidentemente frustrado por el actuar del equipo.
También agregó "El equipo intenta y no puede. Parece que hace falta que nos hagan un gol (para reaccionar). Si queremos luchar por la Champions, tenemos que cambiar. Hay que pensar que es una competición desde cero. La gente del club seguro que está muy caliente y es normal, nosotros también lo estamos. No le damos nada".
Para cerrar, Messi volvió a dejar dudas sobre su continuidad en el FC Barcelona parea la siguiente temporada, que podría arrancar en el próximo mes de septiembre.
“Mi continuidad es lo de menos, el aficionado del Barcelona está caliente por lo que hicimos en esta temporada, desde la derrota en Roma y en Liverpool, la gente se está quedando sin paciencia y nosotros no le damos nada”
