El Barcelona acabó con su sequía de títulos y consiguió la primera corona de la era Xavi Hernández al imponerse con rotundidad al Real Madrid (1-3) en la final de la Supercopa de España.
Un gol de Gavi en el minuto 34, otro del polaco Robert Lewandowski en el 45, y uno más de ¨Pedri, asistidos ambos por Gavi, pusieron en ventaja al descanso al Barcelona.
Apenas pudo descontar Karim Benzema en la prórroga para decorar el marcador para un Real Madrid deslucido en la noche de Riyadh, Arabia Saudita.
Fue muy superior el conjunto azulgrana al equipo del italiano Carlo Ancelotti, cuyos errores en la salida del balón fueron letales.
Xavi sorprendió
Sorprendió el entrenador azulgrana colocando a Gavi de extremo izquierdo, y no a Pedri como acostumbraba a hacer cuando apostaba por el esquema alejado del 4-3-3 clásico del Barcelona.
Contra el Real Madrid salió más bien con un 4-2-3-1, con De Jong y Busquets en un sólido doble pivote, Pedri por dentro muy pegado a Lewandowski y Gavi y Dembélé dando amplitud por bandas.
Y a Xavi le salió el plan a la perfección. Ayudado, también, por una defensa del Real Madrid que todavía no ha vuelto tras el Mundial de Qatar 2022.
Error en la salida de balón de Rüdiger y Camavinga. El primero dio al segundo un pase comprometido, con este de espaldas, y Busquets se anticipó para pillar descompensada a la defensa madridista y que la conexión Lewandowski-Gavi hiciera el resto tras un toque de primeras.
Gavi superó a Courtois, que previamente había sacado una gran mano a un disparo de Lewandowski desde fuera del área, que Balde desaprovechó el rebote mandándolo fuera.
Once después, justo antes de que se mostrase el añadido de la primera mitad, Gavi le devolvió el regalo, en forma de asistencia, a Lewandowski.
Pase a la espalda de la defensa de De Jong, conducción de Gavi, que pareció agotar opciones pero apuró hasta que encontró a Lewandowski solo en el segundo palo para hacer el 0-2.