El anuncio del príncipe Harry y su esposa, Meghan Markle, de renunciar a sus funciones en la realeza británica causó asombro entre propios y extraños.

En una declaración sin precedentes y tras seis semanas de vacaciones, la pareja real anunció el miércoles que buscarían “independencia financiera” después de dar un paso al costado a sus deberes reales.

Hasta ahora, a los Sussex se les había prohibido obtener ingresos de cualquier forma por fuera de la corona, pero ahora podrían obtener grandes sumas por trabajos privados.

Por ejemplo Megan recibía 70 mil dólares al año con su blog de estilo de vida "The Tig" y ahora se espera que gane mucho más por su gran popularidad mundial.

Además, recibía $ 450.00 por su papel en la serie dramática estadounidense Suits y ahora exigiría tarifas mucho más altas si volviera a actuar.

Mientras que Harry podría convertirse en un costoso y requerido orador y exigir hasta 500.000 dólares por unos minutos en el escenario de un evento.

Además, sus patrimonios podrían ayudarles a solventar una vida acomodada en Reino Unido como en Canadá. Se estima que el de Harry es de 39 millones de dólares (26 de los cuales heredó de la fallecida princesa Diana) y Meghan tendría unos 5 millones de dólares.