El sacerdote católico, Juan Rubio Fernández, fue grabado en vídeo mientras oficiaba una misa en aparente estado de ebriedad en la Parroquia de Nuestro señor de la Consolación en España.

El vídeo grabado por un miembro de la iglesia fue subido a una cuenta de TikTok y rápidamente se viralizó en las rede sociales, a tal punto de provocar que el sacerdote renunciara.

En el clip se mira cómo el religioso toma líquido de un cáliz (recipiente), pide a la congregación que se ponga en pie y repentinamente soltó un eructo, hecho que causó gracia e indignación en los presentes.

Fue a través de una carta que Fernández pidió disculpas y aceptó que es un alcoholico.

"Muestro mi decisión firme de ponerme en manos de profesionales que puedan ayudarme a superar la situación personal en la que me encuentro", dice la carta, según el medio internacional El Universal.

"Pido disculpas por el escándalo que este hecho haya tenido que causar, tanto a la feligresía de la parroquia, como al pueblo de Dios que haya ofendido por las imágenes que se han difundido", extiende.

Y es que también la conducta de este sacerdote generó indignación para varios miembros de la iglesia, pues se encontraban niños haciendo la primera comunión y eso fue un mal ejemplo.

De interés: ¿De buen corazón? Ladrón le roba a una joven pero se arrepiente, la abraza y es detenido