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La terminal sampedrana, conocida como la Gran Central Metropolitana, amaneció cerrada este lunes (28.02.2022) por supuesta extorsión. La suspensión de laborehasta el mediodía del lunes no había transporte urbano ni interurbano.
Decenas de pasajeros se encontraban varados en las instalaciones de la Central Metropolitana, muchos en señal de protesta; de su lado, los conductores de las unidades que operan en esta zona alegan que no aguantan las amenazas extorsivas.
A eso de las 7:00 de la mañana se anunció que permanecerá cerrada "hasta nuevo aviso", según los trabajadores de la Gran Central.
Extorsión y pandillas
Los empleados afirman que grupos pandilleros cobran altas tarifas de extorsión a los trabajadores de las empresas de transporte con sede en la terminal de San Pedro Sula.
A pesar de que la MS-18 dejó de cobrar extorsión al rubro de transporte desde que inició la pandemia, según anunciaron en su momento, otros grupos pandilleros han empezado a cobrar altas tarifas de extorsión en este sector de trabajo, de acuerdo con información de las autoridades.
Las tarifas son tan altas que la rentabilidad de los negocios se ha visto afectada. Por este motivo, los directivos y empleados de la terminal sampedrana han decidido cerrar las instalaciones hasta que tengan una solución para este problema que tiene sin ingresos a cientos de familias hondureñas.
Los grupos pandilleros amenazan mediante cartas, llamadas, mensajes de texto y audios a los dueños y empleados del transporte.
Empleados del sector transporte
“Estaremos parados hasta que Gutiérrez nos diga”, manifestaron los empleados de la empresa de transportes Gutiérrez en la zona norte del país. Esta es la misma situación para el resto de los empleados de la Central Metropolitana.
En la Gran Central hay capacidad para, aproximadamente, 250 buses que salen hacia 128 rutas diferentes que operan diariamente a nivel local y nacional. Tiene 59 andenes de salidas y 45 de llegadas. Su capacidad operativa llega a las 4,000 salidas diarias.
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