El virus del dengue se transmite a las personas por medio de picaduras de mosquitos hembra de la especie "Aedes aegypti" infectado. Este es el mismo tipo de mosquito que transmiten el virus del Zika y del Chikunguña, según expertos.

A diferencia de otros mosquitos, este se alimenta durante el día; los periodos en que se intensifican las picaduras son el principio de la mañana y el atardecer, antes de que oscurezca.

La enfermedad del dengue es común en 100 países en el mundo. En regiones tropicales.

El mosquito Aedes aegypti vive cerca de las personas, casas y comunidades. Prefiere lugares de sombra y frescos.Asimismo, se cría en cualquier envase o recipiente donde se almacena agua, ya sea por las personas o por agua de la lluvia.

Este mosquito generalmente pone huevos cerca del agua estancada en recipientes como baldes, tazones, recipientes para los animales, macetas y floreros.

Existen cuatro tipos de virus del dengue (DEN1, DEN2, DEN3, y DEN4). La persona infectada por estos tipos de virus queda inmunizada contra ese virus en especifico pero no contra los otros tres. Por lo tanto, se puede contraer el virus del dengue hasta 4 veces.

¿Cuáles son los síntomas del dengue?

Las personas contagiadas de dengue presentan fiebre elevada, dolor de cabeza intenso, dolor detrás de los globos oculares, dolores musculares y articulares, sarpullidos, nauseas y vómitos.

Los síntomas se presentan en un tiempo de 4 a 10 días después de la picadura del mosquito infectado y por lo general dura entre 2 a 7 días.

Aproximadamente 1 de cada 20 pacientes con el virus del dengue puede evolucionar a enfermedad grave y posiblemente mortal denominada "dengue hemorrágico".

Este dengue grave desencadena en los pacientes dolor abdominal intenso, vómitos persistentes (de al menos 3 veces en 24 horas), respiración acelerada, hemorragias de las encías, fatiga, inquietud y presencia de sangre en el vómito.

Al contraer los síntomas del dengue hemorrágico, se presentan entre las 24 y 48 horas después de que haya desaparecido la fiebre.

Diferencias entre el dengue y el dengue hemorrágico. Foto: www.salud.gov.pr

Medidas de prevención

Para controlar la transmisión del virus consiste en luchar contra los mosquitos portadores.

Prevención de la reproducción de mosquitos:

  • Evitar que los mosquitos depositen sus huevos en lugares donde hay agua, por ende hay que mantener limpia las pilas, cubetas u otros recipientes.
  • Eliminar correctamente los desechos sólidos
  • Cubrir, vaciar y limpiar cada semana los lugares donde se almacena agua para uso doméstico.
  • Aplicar insecticidas adecuados a los recipientes en que se almacena agua a la intemperie.
  • Cambiar frecuentemente el agua de consumo de animales.
  • Vaciar los objetos que puedan acumular agua de lluvia y colocarlos boca abajo.
  • Vertir agua hirviendo en lugares de difícil acceso, con presencia de huevos.
  • Mantener limpio los techos y canaletas de las viviendas
  • Desechar toda la basura que esté alrededor de la vivienda.

Tratamientos

No existe un tratamiento especifico para el dengue.

Pero mientras te estés recuperando, doctores recomiendan beber mucho líquido y contactarse con un médico si tiene síntomas de deshidratación o disminución de orina, boca o labios secos, letargo o confusión, extremidades frías, húmedas y pegajosas.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) da las siguientes recomendaciones:

  • Utilizar medidas de protección personal en el hogar: mosquiteros en las ventanas, usar ropa manga larga, repelentes, materiales tratados con insecticidas, espirales o vaporizadores.
  • Mejorar la participación y movilización comunitarias para lograr el control constante del vector limpiando cunetas entre otras acciones.