Hay grupos de opinión pública que han planteado sus inquietudes en el sentido que los diputados suplentes del Congreso Nacional sean, circunstancialmente, utilizados para la potencial implantación de una asamblea nacional constituyente que ciertos sectores han comenzado a promover de nuevo.
En torno al papel que desempeñan los diputados suplentes, es creciente la demanda de círculos políticos, económicos y sociales para que dicho tema sea analizado con imparcialidad y sin sesgo.
Los legisladores de esta categoría representan un costo presupuestario que no hay que desestimar, pero más esencial es que sea revisada la utilización de estos funcionarios como piezas de maniobras políticas.
En la parte económica, hay que apuntar que los 128 diputados suplentes se han llevado 41 millones de lempiras en concepto de sueldos en el primer semestre de este año, sin tomar en cuenta los beneficios adicionales que reciben.
Como es sabido, los legisladores sustitutos devengan mensualmente 54,000 lempiras, el 60 por ciento de la suma de 90,000 lempiras que corresponde a los propietarios, merced a una reforma a la Ley Orgánica del Congreso Nacional aprobada en la primera quincena de enero de 2022.