De acuerdo con el informe de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) el hombre tuvo una discusión con la mujer por teléfono y luego habría llegado a la vivienda, en donde supuestamente la encontró sin vida.

Tras ver la escena del crimen, el militar huyó del lugar. Según dijo, su esposa se habría disparado con su arma. No obstante, los familiares de la víctima lo señalan como el principal responsable.

El militar tenía varias municiones de armas prohibidas en su vivienda.

Al hombre de 40 años se le detuvo con 11 cargadores de fusiles, un cargador de pistola, 75 proyectiles de fusil, 160 casquillos de bala, 6 granadas, 243 casquillos, 45 municiones, todas de uso prohibido.

La víctima fue identificada como Ana Lizeth Hernandez Cantillano de 33 años.

Según el portavoz de la DPI, Cristian Nolasco, el hombre alega que cuando él llegó a la vivienda su esposa ya estaba sin vida. Sin embargo, se están realizando las pruebas pertinentes para determinar si se trató de un homicidio o un suicidio.

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