Alba Nora Gúnera de Melgar Castro quedará para siempre en la memoria de quienes vivieron la fiesta política partidaria en Honduras en su máxima expresión. Antes y después del retorno a la democracia.

Doña Nora de Melgar nació en el pueblo de Concepción de María, San Marcos de Colón, en mayo de 1942, y fue maestra de profesión en el grado de licenciatura.

Comenzó su vida política como primera dama de Honduras en 1972-1975 al ser la esposa del general Juan Alberto Melgar Castro, quien el 25 de abril de 1975 asumió como jefe de Estado.

Primera mujer candidata presidencial

En 1997, ella marcó la historia política de las mujeres hondureñas al convertirse en la primera en ser candidata a la Presidencia de la República por el Partido Nacional. En esos comicios fue derrotada por el expresidente, entonces candidato liberal, ingeniero Carlos Roberto Flores Facussé.

La ex primera dama alcanzó 844 mil 985 votos, que en ese momento representaron el 42.76% del padrón electoral, calculado en poco más de dos millones de hondureños, una población votante nunca antes registrada.

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No todo quedó ahí, siguió como un bastión de las candidaturas presidenciales nacionalistas, fue respetada y querida en todos los niveles del partido de la estrella solitaria.

Nora de Melgar junto a Ricardo Álvarez (camisa celeste) y el ex presidente de Honduras Rafael Callejas (QDDG). Foto: Ricardo Álvarez.

Otros cargos políticos

Fue vicepresidenta del Congreso Nacional, presidenta del Comité Central, alcaldesa de Tegucigalpa, regidora de la Municipalidad del Distrito Central, diputada al Parlamento Centroamericano (Parlacen) y continuó como integrante activa de la institución hasta que la enfermedad llegó a su vida.

Su trayectoria fue reconocida en el 2014 en el Congreso Nacional de Honduras, cuando los diputados entregaron una medalla de oro y pergamino de honor. También le aprobaron una pensión vitalicia sobre el último salario que devengó como diputada.

A pesar de habérsele visto en delicadas condiciones de salud, en el 2017 llegó en silla de ruedas y con tanque de oxígeno a ejercer su último acto de amor y civismo por la Patria y su Partido Nacional al votar en la Escuela Mixta Los Robles de Comayagüela.

Doña Nora será recordada también como una de las mujeres latinoamericanas con más éxito en la vida política de las naciones. Así fue expresado en el discurso pronunciado durante el homenaje que le hicieron en agosto de 2015, por parte del Parlamento Centroamericano, en el marco del decimoquinto Encuentro Regional de Mujeres de Partidos Políticos.

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