Honduras pasó en la medición de Reporteros sin Fronteras (RSF) de la posición 165 de 180 países en el 2022, a la posición 169 de 180 países en el 2023.

Es decir, cayó cuatro escalones y lo convierte en un país de alto riesgo para el ejercicio del periodismo.

"Los periodistas hondureños estamos experimentando un descenso hacia los infiernos, en el sentido que mientras no hayan condiciones, se fortalezca el mecanismo de protección y se eliminen las leyes que limitan la libertad de expresión, seguiremos ejerciendo bajo un ambiente de riesgo", dijo Dagoberto Rodríguez, expresidente del Colegio de Periodistas de Honduras (CPH).

Ese recorrido al infierno de la prensa hondureña que advierte Reporteros sin Fronteras debe encender las alarmas, considerando que Honduras se ubica en el segundo país peor evaluado del continente, solamente superado por Cuba.

Pese a estos señalamientos, la presidenta Xiomara Castro, aseguró este 25 de mayo en el marco del Día del Periodista Hondureño que defenderá la libertad de expresión como un pilar clave para la prevalencia de la democracia.

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"Quiero confirmar que continuaremos con el compromiso de defender la libertad de expresión y la verdad. Como uno de los principales valores de la democracia", manifestó Castro.

Honduras aparece en la "lista roja" junto a 11 países más, considerados regímenes autoritarios. El informe señala que el descenso del país en esta materia se debe en gran parte a la inestabilidad política y social de los últimos años.

La petición de las organizaciones defensoras de derechos humanos y de periodistas radica en garantizar un mecanismo de protección, con los recursos necesarios para proteger el libre ejercicio periodístico.

También, investigación judicial que reduzca la impunidad y una legislación que en lugar de criminalizar, proteja la libertad de expresión.

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