El Proyecto Victoria que alberga personas con problemas de drogas, alcoholismo, pandillas y menores en riesgo social, en Honduras, está a punto de cerrar porque sus finanzas están en números rojos.

Así lo confirmó a tunota.com el director del centro, Mario Eduardo Fumero, quien reveló que "la ayuda aprobada por Finanzaz no ha salido desde enero. Ya que nos aprueban 3 millones 200 mil al año pero con los papeleos no hemos podido salir adelante porque piden muchos requisitos".

"El temor más grande que tenemos es que el agujero de deuda sea tan grande que entremos en una quiebra irreversible y tengamos que cerrar el programa lanzando a la calle a todos los que están en proceso de rehabilitación sin esperanza de ayuda", indicó el reverendo.

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Cientos de jóvenes se han rehabilitado en este Proyecto. Foto/Tunota.com.

En ese sentido, el Proyecto Victoria está en rojo como en 800 mil lempiras, ya que de acuerdo a Fumero han tenido que solicitar préstamos, sin embargo no dan para más con las deudas.

Afectados por la pandemia y sin ayuda de nadie

El reverendo dijo que los préstamos han solventado los pagos de energía eléctrica y salarios, pero ya han colapsado y se vio obligado a despedir el 50 por ciento del personal.

Además, no han podido generar ningún ingreso desde que comenzó la pandemia por coronavirus en Honduras y solo algunas organizaciones les han colaborado con alimentos, pero del gobierno nadie "salvo del gobernador político de Francisco Morazán y algo de la Alcaldía de Tegucigalpa".

Agregó que debido a la falta de recursos teme que se tenga que clausurar el programa educativo pues ha pedido ayuda a distintas instituciones del gobierno, sin obtener respuesta.

"En el proyecto viven aproximadamente 50 personas y estudiando en el proyecto 'Educa Todos' hay más de 140 alumnos y en el lugar de niños abandonados contiguo al Proyecto tenemos 30 niños", indicó Fumero.

Agregó que han tenido que "suspender los talleres y reducir al mínimo muchas actividades, incluso, despedir al psicólogo. Sólo nos queda el médico que lo paga el Ministerio de Salud".

La situación se agrava con el paso de los días y se teme cerrar los talleres. Foto/tunota.com

En ese sentido, pide con urgencia una respuesta de las autoridades hondureñas pues este proyecto permite cambiar vidas a cientos de jóvenes en riesgo social.

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