El estado de excepción autoriza a las autoridades policiales a detener a las personas que determine y considere responsables de asociarse, ejecutar o tener vinculaciones en la comisión de delitos y crímenes.

De modo que dicho estado de excepción en Honduras se rige por el Decreto Ejecutivo Número PCM 20-2022 y suspende seis derechos garantizados en la Constitución de la República de Honduras, los cuales son:

  • Libertad de circulación
  • Derecho de asociación y reunión
  • Inviolabilidad del domicilio
  • Privacidad a las comunicaciones, entre otros

Según los tratados internacionales en materia de derechos humanos suscritos por el Estado de Honduras como el Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos y la Convención Americana de Derechos Humanos.

El estado de excepción es una medida de índole temporal para abordar una cuestión urgente que pone en riesgo la vida y la integridad de la ciudadanía y que no puede abordarse de otra manera.

Los tratados también dan a conocer que los principios de necesidad y proporcionalidad deben ser respetados en todo momento.

Estado de excepción en zonas de Honduras

El estado de excepción seguirá rigiendo en 89 barrios de Tegucigalpa y 73 de San Pedro Sula, además se sumarán de otros distritos 73 municipios de Honduras.

"Diferentes patrullajes se llevan a cabo en diferentes zonas de la capital, todo con el objetivo de salvaguardar y evitar la comisión de faltas y delitos" tuiteó la Policía Nacional de Honduras.

La presidenta de Honduras Xiomara Castro, impuso la medida el 6 de diciembre para enfrentar a los pandilleros, principalmente de Barrio 18 y Mara Salvatrucha que aterrorizan los barrios pobres y desplegó miles de policías para las operaciones de seguridad.

No obstante, en un informe de enero 2022 la Secretaría de Seguridad señaló que Honduras uno de los países más violentos del mundo pero cerró el 2022 con una tasa de homicidios de 35,79 por cada 100,000 habitantes, la más baja estadística en 16 años.