La alianza de solidaridad entre Televicentro, Emisoras Unidas y centros de acopio de instituciones especializadas llega a las familias que resultaron afectadas el pasado sábado (02.10.2021) tras el pavoroso incendio en Guanaja, Islas de la Bahía.

La ayuda humanitaria llegó y será de mucha ayuda para los residentes de la isla que lo perdieron todo. En ese sentido, la directora de responsabilidad social de TVC-EU, Paola Rieti, dijo que ninguna institución o fundación lo puede hacer solo.

“Nosotros nos hemos aliado con varias fundaciones que llevan años trabajando en nuestro país; como ser Cepudo y Cruz Roja Hondureña para poder brindar alivio a estas personas”, expresó Rieti.

Las muestras de apoyo y solidaridad a los habitantes de Guanaja, Islas de la Bahía llegan de todo el país. Empresas socialmente responsables están prestas para apoyar a la población en las tareas que han iniciado para comenzar a remover los escombros.

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Entre tanto, la representante de Ficohsa, Ivett Martínez, detalló que esa institución bancaria donó madera curada para las familias afectadas por el siniestro.

Por su parte, el Gobierno dispuso desde el principio de la tragedia brindar su apoyo a los pobladores de la isla; con el envío de dispositivos humanos para sofocar el incendio.

Instituciones de socorro como la Cruz Roja Hondureña activaron sus protocolos de auxilio y captación de donaciones. Esto, con el objetivo de atender la salud y otras necesidades de las personas afectas.

“Llevamos carpas, medicamentos y leche, que son productos de primera necesidad que están solicitando desde allá. La idea es montar nuestro propio campamento para poder coordinar y tener nuestro centro en la isla”, manifestó Aracely Ramos, portavoz de la Cruz Roja Hondureña.

Unos 300 empleados contratados avanzan con el retiro de los escombros para facilitar el estudio de la reconstrucción de las áreas afectadas por el incendio.

Daños por incendio

El siniestro dejó 125 viviendas destruidas, más de 2 mil 600 personas afectadas y  entre 700 u 800 damnificadas.

Según reportes preliminares, un 40 por ciento de la comunidad quedó calcinada y para poderla restaurar se necesitan varios años.