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La voz y su música de Valentín Rosales se escuchan en Gante, Bélgica, desde hace dos años. Tiene 29 años de edad y es licenciado en mercadotecnia, con su música y esfuerzo se ha posicionado en el país europeo.
Nació en Tegucigalpa, pero desde el 2020 vive en el viejo continente en una casa compartida con tres estudiantes.
Trabaja como repartidor de comida en bicicleta para vivir y pagar sus estudios en un programa de jazz y pop, potenciando sus destrezas con la batería en la Escuela de Arte KASK & Conservatorium.
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Tiene un álbum propio de diez canciones, entre ellas: City Love como tema principal, que duró dos años en escritura y grabación de videoclip.
También colaboró junto a George Marino y Ale Casanova en la producción Thinking About You.
El video fue realizado por Yeap Creative Team con la colaboración de ProMark Media y la dirección de André Anchecta.
Su primer encuentro con la música fue cuando se fue a vivir a Estados Unidos. “Viví un año en Nashville, Tennessee, que ahí es la ciudad de la música y ahí aprendí bastante de producción, estuve grabando con artistas de country y artistas de pop.
También comencé a escribir mis propias canciones, durante ese tiempo escribí cinco canciones y ahí empecé como Valentín Rosales”, dice, emocionado, en una conversación con En Primera Plana de tunota.
Regresó a Honduras y empezó a producir música con lo que había escrito en Estados Unidos. Relata que en una fiesta mientras estaba con sus amigos, lo pusieron a tocar, y les encanto tanto que lo empezaron a llamar para que lo hiciera en otros lugares.
Estando aquí colaboró con varios artistas, con quienes también tuvo el gusto de compartir escenario o producir con ellos, como es el caso de Chía Casanova, el bajista Miguel Alfaro, el guitarrista Dago Lozano y Elías Espinal, además de otros talentosos hondureños.
Estuvo en eventos como Teletón, restaurantes, desfiles de moda y otros eventos. También ha podido viajar a Hungría, Argentina y Panamá.
¿Cuándo despertó la música en usted?
Mi pasión por la música la tengo desde que tengo memoria, como desde los cinco años, con clases de batería. Me acuerdo que desde niño agarraba las ollas de mi mamá y fingía tocar batería.
Desde mi infancia estuve en el coro de la iglesia y cuando tenía 16 años entré a una banda llamada “Los cuñados de todos”, donde pude tocar en restaurantes y en bares.
En Honduras es algo difícil el tema de la música y por eso estudié Mercadotecnia.
Siempre he querido estudiar música, pero mis papás me dijeron que no, que siempre sacará otro título como suele pasar normalmente en las familias. Y me gradué, pero nunca trabajé de ello.
¿Cómo llegó a Bélgica?
Un día me llené de valor y decidí llamar a un amigo que vive en Bélgica y estudiaba música también. Le pedí ayuda para irme a estudiar allá. Mi amigo me contestó que me iba a recibir y que no había problema.
Así fue como a principios del 2020 llegué a este país y me aventuré en el mundo de la música comenzando con producción.
Trabajo como repartidor de comida en bicicleta para vivir y pago mis estudios en un programa de jazz y pop.
¿Cuál fue el momento más difícil en su carrera como músico?
La verdad, un momento difícil fue cuando llegué aquí, porque el nivel musical es bien alto, muy profesional en educación.
En el conservatorio las audiciones requieren un nivel muy alto, que normalmente alguien que estudió todo su colegio en una escuela de música se le hace fácil, y yo no estaba preparado.
Estuve todo un año estudiando para la audición y me resultó un tanto difícil porque llegué a creer que no lo iba a lograr. Con respecto al idioma, tuve que aprenderlo, lo estuve estudiando y todo ese año fue como una batalla de “sí puedo, no puedo”, aprendiendo el idioma, sociedad.
Fue un cambio bastante impactante, se vino la pandemia y todo fue como nuevo. Fue de los momentos más difíciles que viví.
Durante ese tiempo escribí mi propia música, fue un momento de reencontrarme conmigo mismo, de crecimiento, entender lo que quería y replantearme, y así poco a poco logré ir a la audición en los conversatorios y los pasé, ya casi termino y me ha ido super bien.
¿Cuál es el nombre de la primera canción que produjo en Bélgica?
“I’m not ready” (No estoy listo). Así es el nombre de la primera canción que saqué en Bélgica con la disquera Major 4 Records.
La escribí en 2020 durante una mezcla de sentimientos que había en mi corazón y mente. Irme de Honduras dejó un sentimiento encontrado y representó dejar atrás las cosas que amaba y a quienes amo, dejando entrever todas esas sensaciones que había para ese entonces en mí. De empezar una nueva vida en un lugar diferente.
¿Cuál es el logro personal más importante de su vida?
En Europa ya hice y hago proyectos con varios músicos, colaboro con varios hondureños que están Alemania y Bélgica, haciendo conciertos en línea.
Tuve la oportunidad de grabar un álbum para Josué Castro, que es un guitarrista clásico hondureño y con el lanzamos un disco que se llama “Sonidos de la otra orilla”.
En Europa tuve la oportunidad de colaborar con varios artistas, entre ellos uno de Londres, llamado Youngr.
También grabé una canción que saldrá este año, se llama "Die for you", producida en Bélgica y se vienen muchas colaboraciones, proyectos y conciertos. Entre ellos ir a Honduras y cantar mis canciones en una gira.
“Me llené de valor y ahora soy feliz. Reparto comida en bicicleta para vivir”.
Valentín Rosales. Cantante hondureño en Bélgica.
2. Grabó una canción que saldrá este año, se llama "Die For You", producida en Bélgica.
3. Viene en septiembre a Honduras para hacer una gira de conciertos para tocar sus canciones.
POR: YENIFER OLIVA.
Este es un artículo de la versión impresa de tunota. Lea más noticias relacionadas.
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