Una deuda pública cercana al 60 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), el subempleo y el déficit financiero de la Empresa Nacional de Energía Eléctria (ENEE) son, según expertos, los principales desafíos económicos del nuevo gobierno de Honduras, que encabezará Xiomara Castro a partir del 27 de enero de 2022.

El elevado nivel de la deuda interna y externa, que este año sobrepasa los 16 mil millones de dólares (unos 384 mil millones de lempiras), constituye uno de los principales desafíos del nuevo gobierno, dijo el exministro de Finanzas, Hugo Noe Pino, también electo diputado por el partido Libertad y Refundación (Libre).

Señaló que la nueva Administración deberá pagar en 2022 alrededor de 52,600 millones de lempiras (2,178 millones de dólares) por el servicio de la deuda pública, lo que representa el 30 por ciento del presupuesto nacional.

Honduras ha sido incluida en las naciones que tienen "una amenaza de colapso por su nivel de deuda", en gran parte para financiar el gasto público, apuntó Hugo Noe Pino, quien también fue presidente del Banco Central de Honduras de 1994 a 1997.

Deuda pública

Reducir la deuda pública requiere disminuir el déficit fiscal, que en 2021 podría rondar el 5 por ciento, indicó Noé Pino, uno de los asesores en materia económica de Xiomara Castro, virtual presidenta electa de Honduras.

El nuevo Ejecutivo, además, deberá "reperfilar" la deuda, es decir, "cambiar deuda cara por deuda barata", añadió.

"Cambiar deuda cara por deuda barata supondría un alivio en los pagos anuales y la combinación con la reducción del déficit fiscal haría que el nivel de la deuda fuese bajando", enfatizó el economista.

Añadió que espera que en los primeros 100 días del gobierno de Castro, esposa del expresidente hondureño Manuel Zelaya, quien fue derrocado el 28 de junio de 2009 por un Golpe de Estado, "se puedan tomar algunas medidas para solucionar este problema".

Hugo Noe Pino, exministro de Finanzas y expresidente del Banco Central de Honduras.

Renegociar el déficit

La expresidenta del Colegio de Economistas de Honduras, Liliana Castillo, coincidió con Hugo Noé Pino en la necesidad de renegociar la deuda pública del país centroamericano.

Según Castillo, la deuda contraída con los organismos multilaterales, que asciende a 5,300 millones de dólares (unos 127 mil millones de lempiras), es la que se podría renegociar porque es "la que tiene un plazo más largo para pagarse y una tasa de interés más baja".

"Hay que ver cómo se alarga un poco el plazo (de pago) y tal vez bajar la tasa de interés", señaló la economista.

Otro gran problema que enfrentará el gobierno de Castro es el déficit financiero de la ENEE, indicó el economista Claudio Salgado.

Añadió que el nuevo gobierno deberá buscar "cómo solventar ese problema de la ENEE y la deuda que ha acumulado de más 80 mil millones de lempiras (3,313 millones de dólares)".

Crisis financiera de la ENEE

La ENEE atraviesa una crisis financiera que algunas de sus autoridades atribuyen en parte a que compra energía cara a empresas privadas y la vende barata.

Según Claudio Salgado y Hugo Noé Pino, es necesario revisar los "contratos sobrevalorados y amañados" en la ENEE, porque constituyen "una enorme carga" para las finanzas de la estatal eléctrica.

Al respecto, Hugo Noé Pino señaló que el equipo de transición del nuevo gobierno trabaja ya en un plan agresivo de reducción de pérdidas de la ENEE.

El actual gobierno de Honduras, que preside Juan Orlando Hernández, inició en octubre de 2019 un proceso de ordenamiento, automatización y modernización de las finanzas de la estatal eléctrica, sin haber logrado resultados significativos, según los economistas.

El economista Claudio Salgado.

Apoyo a pequeñas empresas

En el campo laboral, el principal reto de Honduras es reducir el subempleo, que incluye empleados informales y a los que trabajan más horas de las que querrían y ganan menos de lo que establece la ley, señaló Salgado.

El 80 por ciento de los 9.5 millones de habitantes que tiene Honduras tiene problemas de empleo y el 75 por ciento vive en pobreza, afirmó el economista, quien instó a las nuevas autoridades del país a apoyar a las pequeñas y medianas empresas para reducir el subempleo.

Pese a los desafíos que presentan por su baja productividad y alta informalidad, las pequeñas y medianas empresas generan la mayor parte del empleo y "no tienen tantas opciones como la gran empresa", pues apenas reciben el 3 por ciento del total de préstamos que otorga el sistema financiero, añadió Salgado.

El subempleo en Honduras pasó del 60 por ciento, en 2019, al 70 por ciento, en 2020; y la tasa de desempleo abierto se ubicó el año pasado en casi 11 por ciento, una cifra superior al 5.7 por ciento de 2019, según cifras oficiales.

La alta tasa de subempleo y desempleo es una de las causas de la migración de ciudadanos de Honduras, donde 2.8 millones de personas están desempleadas, coinciden los economistas.

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