A pocos días del traslado de los vuelos internacionales del aeropuerto Toncontín hacía Palmerola, expertos declaran que esta acción dejará numerosas pérdidas económicas que dependen de la terminal aérea ubicada en la capital.

Pérdidas innumerables de empleo que dependen de Toncontín, caída del turismo y comercio local de Tegucigalpa, son algunas de las consecuencias que traerá consigo el cierre de la terminal aérea.

En ese sentido, el director de la Cámara de Comercio e Industrias de Tegucigalpa (CCIT), Rafael Medina, menciona que las pérdidas serán en torno a un "10 o 15 por ciento de la actividad comercial en Tegucigalpa".

Y agregó: "Muchos años se ha luchado porque este aeropuerto quede a nivel operativo, nunca nos hemos opuesto a la construcción de otro aeropuerto, pero a 80 kilómetros creemos que es demasiado largo de la ciudad capital".

Hasta un 20 por ciento bajará la actividad aeroportuaria de Toncontín, dejando así a Tegucigalpa como la única ciudad de Latinoamérica sin aeropuerto.

"Esto va a generar un alto costo operativo y al final las aerolíneas dejarán de funcionar allí y así irá cerrando Toncontín poco a poco. El destino que tiene Toncontín es a desaparecer, a morir", declaró el miembro de la sociedad civil Juan Carlos Rodríguez.

Sin embargo, desde el gobierno apuntan que la apertura del aeropuerto de Palmerola, reactivará la economía a nivel nacional.

"Los vuelos que estaban en Toncontín pasarán a Palmerola, lo que significa que es muy probable que como tendremos más competencia de aerolíneas aéreas, los costos de los boletos aéreos sean más bajos", expuso Carlos Madero, coordinador general de gobierno.

El aeropuerto de Palmerola iniciará operaciones el 15 de octubre de 2021, misma fecha en que las cuatro aerolíneas pasan de operar de Toncontín a Palmerola, dejando a la terminal aérea de la capital en estado no funcional.

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