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Un juez natural admitió el miércoles la solicitud de extradición a Estados Unidos contra el expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández (2014-2022) para que sea juzgado por delitos de narcotráfico.
Luego de una extensa jornada durante la segunda audiencia de presentación y evacuación de pruebas, el juez de extradición, Edwin Ortez, dictó una resolución a favor de la solicitud realizada por Estados Unidos, la cual fue presentada el pasado 14 de febrero de 2022.
Durante la audiencia de presentación y evacuación de medios probatorios, tanto la parte acusadora, en este caso la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York, y la defensa de Hernández, presentaron sus elementos probatorios ante el juez natural designado para conocer el caso.
La parte defensora mostró alrededor de 20 medios de pruebas en las que el juez de extradición se pronunció sobre la admisibilidad de algunos y la inadmisibilidad de otros elementos.
Aproximadamente, el 50 por ciento de los medios de prueba presentados por la defensa de Hernández fue rechazado por el juez natural. Entre la carga probatoria que admitió el togado se encuentra el testimonio de Juan Orlando Hernández y su esposa, Ana García.
La defensa del expresidente de Honduras argumentó que Estados Unidos no envió ningún medio probatorio reconocido por la legislación hondureña para sustentar la solicitud de extradición contra el exmandatario.
Proceso judicial contra Juan Orlando Hernández
El 14 de febrero, después de que el Gobierno de Xiomara Castro tomara posesión en Honduras, el 27 de enero, Estados Unidos anunció la solicitud de extradición contra Juan Orlando Hernández, a quien señalaron de haber conspirado para el tráfico de más de 500 kilos de cocaína hacia territorio norteamericano.
La Embajada de Estados Unidos en Honduras confirmó el pedido de extradición de Hernández afirmando que el expresidente "participó en una conspiración violenta de narcotráfico, para recibir cargamentos de múltiples toneladas de cocaína enviadas a Honduras desde Colombia y Venezuela, entre otros lugares".
En el texto señalan tres delitos en los que Hernández supuestamente conspiró para importar una sustancia controlada a los Estados Unidos desde un lugar fuera del mismo, que incluye la fabricación, posesión y distribución de la droga.
Además, el uso y portación de armas de fuego o ayudar e instigar a su uso, entre ellas: ametralladoras y dispositivos destructivos, en apoyo para el tráfico de los narcóticos; y otro también relacionado con el porte de armamento.
Hernández fue capturado frente a su casa en la Residencial San Ignacio, en Tegucigalpa, el 15 de febrero. De su casa fue sacado esposado de manos y pies.
Luego fue llevado a una unidad especial de la Policía Nacional por orden del juez de extradición.
Vea: Estos son los cargos por los que Estados Unidos solicita en extradición al expresidente Hernández
Audiencias contra Hernández
La primera audiencia ante el juez de extradicción se celebró el 16 de febrero en la sede de la Corte Suprema de Justicia, en la capital hondureña, en donde se le informó cuáles son los cargos por los que la parte acusadora solicita la extradicción.
El juez Ortez pactó para el 16 de marzo, un mes después, la audiencia de presentación y evacuación de pruebas.
El 15 de marzo llegaron a Honduras las pruebas de Estados Unidos contra el expresidente Hernández.
La audiencia de presentación de pruebas comenzó a las 9:00 de la mañana, y finalizó a las 5:40 de la tarde, con varias pausas de por medio.
Según informó el periodista estadounidense Jeff Ernst, los medios de prueba de la Fiscalía consisten en dos declaraciones juradas. "Básicamente son un resumen de la evidencia de un fiscal y un agente de la Administración de Control de Drogas (DEA, en inglés); no es evidencia o prueba en sí", explicó.
Hernández ha negado las acusasiones
El expresidente Juan Orlando Hernández, quien siempre ha rechazado las acusaciones de narcotraficantes y autoridades judiciales de Nueva York, ha reiterado que a él lo acusan "narcotraficantes y asesinos confesos que fueron extraditados por 'mi Gobierno', o que tuvieron que huir y entregarse a las autoridades de Estados Unidos por temor a ser extraditados".
Las acusaciones se refieren a señalamientos de algunos narcotraficantes ante distintos tribunales estadounidenses, que confesaron supuestos pagos ilícitos al círculo más cercano de Juan Orlando Hernández para poder traficar la droga por territorio hondureño para luego exportarla a Estados Unidos.
Sumado a estos señalamientos, se celebró un juicio contra su hermano Juan Antonio Hernández, más conocido como "Tony", que era diputado del Congreso Nacional cuando fue capturado.
"Tony" Hermández, considerado un "narco a gran escala", recibió una sentencia a cadena perpetua más 30 años de prisión por narcotráfico.
Durante el juicio al hermano se puso en evidencia cómo los grupos de narcotráfico infiltraron casi todas las esferas del poder en Honduras, desde el ámbito judicial pasando por la fuerza pública hasta llegar al Poder Ejecutivo.
De hecho, los propios fiscales del caso señalaron directamente a Juan Orlando Hernández, acusándolo de "facilitar el uso de personal de las Fuerzas Armadas hondureñas como seguridad" para los narcotraficantes.
Otro de los casos que salpicó al expresidente Hernández, y que finalmente disparó el proceso contra el exmandatario, fue el de Geovanny Fuentes Ramírez, también juzgado por la Corte del Distrito Sur de Nueva York y hallado culpable a principios de febrero de este año.
Fuentes fue condenado a cadena perpetua más 30 años de cárcel por el tráfico de al menos cinco toneladas de cocaína y portación ilegal de armas, al considerar que protegía su mercancía con el uso de ametralladoras.
