Era un día normal de labores en el Cuerpo de Bomberos para Ever Velásquez. Se preparaban para combatir las llamas de un incendio forestal en la reserva del Uyuca, en el sector de La Montañita, en Tegucigalpa, un hecho que cambiaría el destino de cinco personas.

Velásquez nunca pensó que ese 25 de abril de 2018 su vida iba a dar un giro de 180 grados; un cambio que marcó su vida para siempre.

El incidente cobró la vida de cuatro bomberos, siendo Ever el único sobreviviente.

“Para mí, ese sigue siendo uno de los momentos que marcaron mi estado emocional y psicológico; sigo recordando como si fuera ayer los gritos de mis compañeros”, expresó.

Tres años después de la tragedia vuelve a sonreír, el entusiasmo y la alegría se ven reflejados en su rostro; Ever manifestó que ahora está viviendo una segunda oportunidad que es parte de un plan perfecto que Dios tenía preparado para él.

Un proceso en el que ya lleva tres años y que ha estado lleno de promesas incumplidas de parte del gobierno; injusticias que según el joven bombero no se deben de dar.

“Al final se aprovecharon de ese pequeño flagelo y se perdieron en el trayecto; hace poco comencé luchando con las cirugías y más bien lo que gané fue que me hablaran de correrme”, lamentó.

Según Ever Velásquez, esas circunstancias lo motivaron a aceptar una candidatura a diputado por el partido Unificación Democrática(UD).

De ganar un curul, luchará por mejorar las condiciones laborales a los bomberos, la protección ambiental y por la igualdad de las personas con discapacidad, de acuerdo a lo que relató para En Primera Plana de tunota.com.

¿Cómo fueron sus primeros años de vida?

Nací en Jesús de Otoro Intibucá, el 11 de agosto de 1996; tuve una infancia bastante complicada, no crecí con mis padres, solo con mi papá y mi madrastra.

La situación económica fue bastante difícil; no iba a poder continuar mis estudios, me iba aquedar solo con el sexto grado, debido a la problemática de trabajo que había en mi pueblo.

Mis abuelos me ayudaron a culminar mis estudios, fue un proceso bastante difícil, soy hijo único y mi padre no ha podido tener más, fue una infancia difícil la que me tocó vivir.

Ever Velásquez celebrando sus 11 años.

¿Dónde realizó sus estudios?

En Tegucigalpa estudié en diferentes centros públicos, en el Centro Educativo Príncipe de Asturias cursé el ciclo común y la secundaria la cursé en el Instituto Mixto Cantares.

¿Cómo fue su vida estudiantil?

Al inicio fue difícil el proceso de adaptación, venir de una zona rural a la ciudad capital es un cambio radical, aquí suelen burlarse por el acento que traemos de nuestros lugares, para nosotros es un poco difícil, pero no lo podemos cambiar.

Una vez adaptado, compartí con muchas personas y viví experiencias bastantes diferentes.

Hablemos de su llegada al Cuerpo de Bomberos, ¿qué le motivó para formar parte de esta institución?

Mi tío Darwin fue el primero de mi familia que incursionó en la carrera de bomberos, siempre acostumbraba, por las tardes de los fines de semana, ir a jugar pelota, hay ciertas estaciones que tienen canchas y mi tío me llevaba a jugar futbol.

Es así como tuve la oportunidad de escuchar las alarmas de emergencias y pude ver como los bomberos bajaban corriendo, cómo se ponían su equipo, cómo los camiones encendían las sirenas.

También observé que todas las personas de mi colonia, antes de llegar a los bomberos, siempre iban a buscar a mi tío Darwin; para que él les ayudará a tratar alguna herida de sus familiares, él siempre maneja un botiquín en casa, en muchas ocasiones los curaba; nunca les cobró, la gente buscaba darle dinero y él decía no les cobraría, que ese era su trabajo.

Él es una persona muy querida dentro de la colonia, esa cercanía fue la que me llamó la atención para querer formar parte de los Bomberos. Traté de ingresar a la institución en 2014 pero en ese momento no abrieron cursos.

Como no pude ingresar y necesitaba un trabajo, comencé a laborar en el Hotel Intercontinental en la parte de limpieza, en ese momento conocí a otro amigo, él me invitó a hacer el examen en Comayagua para ingresar a la Policía Nacional y acepté.

Ever Velásquez recibiendo su diploma de estudios para formar parte del Cuerpo de Bomberos.

Después de estar laborando dos años para el área de investigación criminal en la Policía, mi tío me dijo que iban abrir cursos; mi sueño siempre fue ser bombero y no lo dude dos veces, dejé la Policía y me sometí al proceso de evaluación. Al final lo logré y tuve la oportunidad de ponerme el uniforme.

En abril de 2018 sucede un hecho que cambió su vida, un incendio en el sector de la Montañita, salida al oriente de la capital provocó una catástrofe; ¿Qué fue lo que pasó en el lugar, cómo se dieron los hechos?

Ese 25 de abril del año 2018 fue una fecha que cambió para siempre mi vida; para nosotros era un día normal, sabíamos de la alta demanda que se presentaba producto de la temporada de incendios forestales.

Fuimos notificados que había cuatro incendios en diferentes puntos de la capital y que probablemente nos iba a tocar brindar apoyo a uno de ellos.

Nos notificaron que nosotros íbamos atender el incendio de La Montañita, nos movilizamos al lugar, durante el trayecto íbamos bromeando; ese día jugaba el Real Madrid y la Juventus, íbamos apostando quiénes iban a pagar el arroz chino.

Ever Velásquez con sus compañeros del Cuerpo de Bomberos, antes del incidente que cambió su vida para siempre.

Nuestra misión era apagar el incendio rápidamente para poder regresar a tiempo y por lo menos ver el segundo tiempo del partido.

Cuando llegamos al lugar, descendimos aproximadamente 40 minutos al punto donde se ubicaba el incendio, comenzamos a trabajar, todo era normal para nosotros.

Llegamos nueve bomberos, producto del trabajo nos dividimos en dos grupos; es ahí donde las decisiones de los jefes o de los que van a cargo de las misiones influye muchísimo; en una parte del incendio, el que iba a cargo mencionó que iba a realizar un contra fuego, nos ordenó que comenzáramos una ronda.

Una ronda es quitar todo lo que se pueda quemar y dejar un espacio en el suelo en donde no quede nada que pueda tomar fuego, las reglas dicen que se debe hacer el doble del material combustible y en ese lugar era de un metro de alto, por eso tenía que ser mínimo de tres metros.

El encargado no respetó las reglas, había un árbol de pino caído y nosotros le dijimos que no iba servir de nada el trabajo que estábamos haciendo porque el fuego por ahí se iba a pasar, pero como era el jefe y tomaba las decisiones no nos hizo caso y continuó aplicando la técnica que él quería. 

Luego, el tronco que nosotros le mencionamos hizo que el incendio se pasará, y generó una división entre los dos grupos, nosotros comunicamos que estábamos bien, y el segundo grupo reportó que iban a salir por el otro lado de la montaña y que no tenía inconveniente.

En el caso de nosotros decidimos quedarnos en la parte media de la montaña, en donde estaba quemado, como lo indica el libreto de las reglas, porque el fuego ya no regresa al lugar que tomó fuego.

Sin embargo, no sabíamos que en la parte baja venía un contra fuego que fue producido por otra institución; en el lugar se encontraban trabajando miembros de las Fuerzas Armadas y del Instituto de Conservación Forestal (ICF) al final no puedo asegurar quién fue que realizó la acción.

Imagino que no se percataron que nosotros estábamos trabajando en el lugar producto de la mala comunicación interinstitucional. Cuando estábamos en la parte media, el humo nos comenzó asfixiar, no podíamos salir por arriba porque ya se nos había pasado el fuego, nuestra única alternativa era salir hacia abajo.

Decidimos descender por medio de una vieja ruta de una quebrada seca que estaba en el lugar, cuando estábamos doblando la montaña uno de mis compañeros grita: !fuego¡.

Cuando él grita es porque ya tiene el incendio de frente, tratamos de retroceder, pero era imposible; el fuego venía con el viento a su favor, y en menos de cinco segundos nos estábamos quemando.

Para mi ese sigue siendo uno de los momentos que marcaron mi estado emocional y psicológico, sigo recordando como si fuera ayer los gritos de mis compañeros.

Eran gritos desgarradores, no solamente venían de la lengua o de la garganta hacia afuera; el estarse quemando es muy doloroso.

Son momentos muy dolorosos, recordar los gritos de auxilio: ¡Dios mío, ayúdanos!, estábamos en shock, no podía creer que estaba pasando por esa situación.

¿Cuáles fueron sus pensamientos en ese preciso momento de la tragedia?

Lo único que pensaba era pedirle perdón a Dios, sentía que ese era mi último día de vida, no sabía como iba salir, el dolor era agobiante, lo único que uno hace es pedir perdón.

El dolor no deja pensar más allá, cuando logre salir, caminé y me despojé de lo poco que quedaba de mi uniforme, por eso es que yo llegue en ropa interior y calcetines al Seguro Social.

Cuando caí pensé que pude haberme despedido de mi familia y haberle dicho cuando los amaba y no lo hice.

Ever Velásquez antes del incidente del incendio en La Montañita.

¿Qué pasó después de la tragedia? ¿Cómo reaccionó ante esta situación?

Después del incidente, nos ingresaron al Seguro Social, luego nos trasladaron al Hospital Escuela porque el Seguro no tiene un área para poder atender este tipo de emergencia.

Cuando desperté tenía a mi lado a uno de mis compañeros, me dolía verlos, muchos de ellos tenían hijos; dejaban a un lado el dolor propio y pensaban en el futuro de sus parientes, rogaban para que oraran y velaran por ellos.

No nos permitían ver a nuestros familiares, era un momento de agonía muy fuerte y nos enteramos que nos iban a trasladar a la Ciudad de México; sabíamos que estábamos en riesgo, no conocíamos el nivel de peligro, ni el porcentaje de sobrevivir, pero si lo podíamos sentir que nuestro cuerpo estaba delicado.

Ever Velásquez, tardó mucho la recuperación, ¿cuál fue la reacción de su familia ante este hecho?

A mi familia se le hacía muy difícil, pero muchas veces grababan videos para tratar de motivarse, ellos trataban de sonreír, pero yo era capaz de detectar la tristeza y las ganas de llorar en sus ojos, en su mirada y en sus gestos.

Siempre me brindaron el apoyo necesario a pesar de la distancia; el proceso fue muy doloroso y difícil.

Personal del hospital en México celebrando el cumpleaños de Ever.

Llegó el momento que marcó mi vida para siempre; este fue cuando me miré en el espejo y observé el cambio radical que sufrió mi rostro y mi cuerpo en general; ese fue el día más difícil.

El dolor físico que sufrí se superó; pero ahora tengo que lidiar con esto por el resto de mi vida y saber que no es irreversible; no puedo utilizar un pasamontaña toda mi vida; tengo que enfrentarme a una sociedad que vive más de la apariencia.

He pensado que quien se podrá fijar en una persona como yo y más en ese momento que mi rostro estaba dañado, a mis 21 años tener un giro de 180 grado, tanto en parte emocional como en la parte física; no pude evitar caer en depresión y eso fue lo que sucedió, no pude con esa primera impresión de verme al espejo en esas condiciones.

¿Cómo logra salir de esa situación difícil de la depresión?

Se me había asignado a una psicóloga desde el inicio del proceso, ella fue la encargada de ponerme frente al espejo, y me dijo que pesara en tres cualidades de Ever Velásquez, y me puso el espejo dado vuelta; justamente cuando ella lo gira y me observó caí en depresión, no pude con mis emociones.

Ella trataba de motivarme y darme palabras, es difícil para una persona que está pasando por algo así recibir palabras de una persona que no presenta ningún tipo de daño ni quemaduras.

Creo que Dios es grande y siempre tiene propósitos en la vida de cada uno; en ese hospital en México, que es solo para pacientes quemados, conocí a una persona que perdió una pierna, en una ocasión nos pusieron juntos a hacer unas sentadillas y él se hizo cinco más que yo; tenía una motivación y una alegría bastante contagiosa, pero yo estaba dolido de la vida.

Le pregunté qué es lo que realmente le motivaba para tener esa autoestima; la respuesta de esta persona fue la que realmente me hizo cambiar de parecer; él me dijo que en la vida muchas veces los seres humanos somos bastante egoístas, nos olvidamos que no solamente nosotros sufrimos, sino que también nuestras familias, porque no saben si íbamos salir vivos o muerto de un centro hospitalario.

Él dijo que si sus hijas eran capaces de sonreír, él también lo podía hacer, a pesar de las adversidades de la vida. Medité y pude darme cuenta que sus palabras estaban llenas de razón y lógica; fue ahí que empecé a superar lo que está pasando, fui poniendo empeño e interés.

¿Cómo se siente después de haber transcurrido tres años del incidente?

Tres años después la vida me sonreído de manera diferente; fue difícil integrarse a la sociedad, lo más complicado fue enfrentarme a los niños porque muchos me tienen miedo y se asustan; son cuestiones psicológicas que aún me duelen un poco; porque todavía no tengo hijos y me pongo a pensar que será de mi hijo cuando me vea; si se me da la oportunidad de formar una familia.

Sin embargo, he tenido un gran desarrollo, una gran motivación de realizar muchos sueños, he podido regresar a mi institución y seguir haciendo lo que más me gusta; fui capaz de regresar a los incendios forestales.

La primera vez que estuve frente al fuego después de la tragedia fue un momento épico porque quería saber si realmente había quedado traumado; al saber que fui capaz de lograrlo hizo que me volviera la adrenalina como si fuese el primer día que me puse el uniforme, ese día me dio mucha alegría.

Ever Velásquez vuelve a combatir los incendios forestales.

A pesar del daño, soy capaz de valerme por mí mismo, puedo desarrollarme en la sociedad como cualquier otra persona.

Cuatro de sus compañeros perdieron la vida en ese hecho, ¿Qué recuerda de ellos?

Muchos de ellos formaron parte de mi formación como bombero, tenían muchos años de pertenecer a la institución, recuerdo el carisma y el cariño de cada uno de ellos, muy profesionales, siempre transmitían alegría, esa es la forma que prefiero recordarlos.

¿Se ha reunido con los familiares de estas personas?

Después que regresé de México tuve la oportunidad de reunirme con sus esposas, no sabía cómo iban a reaccionar al verme, porque de cinco personas sólo regresó una con vida; pero mi mentalidad cambió por completo al recibir los abrazos y las palabras de aliento de cada una de ellas.

Durante este proceso de tres años ¿Has recibido ayuda de parte del Gobierno?

Eso se ha convertido en una problemática, cuando regresé me anduvieron en muchos medios de comunicación, de un lado a otro, prometiendo que iban a terminar mi tratamiento, que me iban hacer una casa y una mejora salarial.

Al final se aprovecharon de ese pequeño flagelo y las promesas se perdieron en el trayecto; hace poco comencé luchando para terminar mis cirugías y más bien lo que me gané fue me hablaran de correrme, lo que me sucedió fue un accidente laboral y no es justo que me hayan amenazado con despedirme.

No han podido despedirme porque saben que los medios de comunicación van a generar presión sobre ellos.

Cuando habla de amenazas de despidos ¿fueron verbales las amenazas o le hicieron algún tipo de notificación escrita?

No, fue verbal, tanto por tanto de la máxima autoridad como de las autoridades del departamento legal.

Él me mandó al departamento legal para que me amenazaran en correrme, después él me lo dijo directamente en una reunión.

¿Se está refiriendo en este caso al comandante general del Cuerpo de Bomberos?

Es correcto, él es la máxima autoridad.

¿Cree usted que es injusto lo que está haciendo el Cuerpo de Bomberos, de que se quiera operar y no lo dejen?

Totalmente, me siento bastante dolido, no en sí de la institución, si no de la persona que la dirige, en este caso es la que toma las decisiones, han habido esas amenazas para tratar de amedrentarme y que yo no hiciera ningún tipo de bulla.

Ninguno de ellos me va entender porque no están quemados, yo soy el que me veo todos los días en el espejo y se por qué estoy pidiendo esas operaciones. A mí se me hicieron tres promesas y jugaron prácticamente con mis sentimientos.  

¿Cuántas cirugías le hacen falta?

Lo que se me había hablado desde el inicio cuando yo regresé de México es que me hacían falta un aproximado de siete cirugías, para reconstrucción de orejas, mejoramiento del labio inferior y superior, de la mejía y ojo derecho, pero al final yo solo estaba exigiendo dos; únicamente en mi boca.

¿No ha podido continuar con estas cirugías?

He estado presionando a las autoridades de mi institución y a raíz de eso se me ha amenazado por estar exigiendo lo que se me prometió, y hasta la fecha todavía sigo enviando informes con cotizaciones para poder contactar a los doctores en México, pero no he recibido respuestas.

 ¿Estas cirugías se las van a realizar en México?

Estoy buscando donde sea posible, traté de contactar al doctor Cherenfant, pero ha sido bastante complicado, he buscado a otros médicos, pero ellos consideran que no están preparados para atender este tipo de piel, me recomiendan buscar un micro cirujano y en Honduras no hay solamente en México.   

Hablemos de su candidatura a diputado por el Congreso Nacional, ¿qué le motivó incursionar en política?

Lo que me impulsó a formar parte fueron las injusticias que viví al encontrarme en esta situación, muchos compañeros no hablan de las situaciones que han vivido porque lo que utilizan son las amenazas de despido, ese tipo de injusticias considero que no se deben de seguir dando.

El problema es que la política se ha involucrado en todas las instituciones, ahora todo se mueve por medio de eso y no debería de ser así; el trabajo se debería conseguir conforme a la educación y la capacidad de las personas y no por cuello.

Lo otro por lo que decidí entrar en política sigue siendo el medio ambiente, perdí a cuatro compañeros en la lucha por apagar un incendio forestal, me dolió que en 2020 los incendios forestales se incrementaron.

La gente no se ha dado cuenta que producto de ese daño después estamos llorando cuando vienen los huracanes, pero aquí nunca estamos preparados; es un tema que me interesa.

El otro punto que me motivó es la igualdad para las personas con discapacidad, si bien es cierto no me considero una persona discapacitada porque no perdí ninguna extremidad de mi cuerpo; pero he recibido discriminación por personas que creen que no puedo logar algo por mis quemaduras o recibo lastima por parte de las personas.

Necesitamos una igualdad de oportunidades, aunque existen leyes que en teoría deberían brindarnos estos derechos a las personas con discapacidad, pero la realidad es otra. Esos son los tres puntos principales por los cuales he decidido entrar en política.

Una segunda oportunidad de vida, así describe Ever haber sobrevivido a la muerte.

¿Cómo es que llega a ser el candidato a diputado por Francisco Morazán por la Unificación Democrática (UD)?

Al inicio cuando, yo regresé de México, una de las personas me buscó y me ofreció pertenecer a la UD, no lo tomé enserio, solamente dije que lo iba a pensar por que no tenía ningún tipo de intención; acababa de llegar y tenía muchas promesas de parte del gobierno.

Ante la problemática que me he visto involucrado terminé aceptando y hablé con los dirigentes del partido; les dije que yo no me iba a someterme en ningún caso a lineamientos dictados por el partido para defender intereses particulares, que si era así, no iba aceptar.

Tenía mis tres puntos principales y eso eran los que yo iba a defender; pero si pretendían que yo defendiera otro interés personal o político de la institución no lo iba aceptar, estuvieron de acuerdo con mi planteamiento.

¿Había participado antes en algún partido político?

No, incluso va ser primera vez en mi vida que voy a votar, anteriormente no lo pude hacer; pero mi familia ha sido a fin a partido políticos, pero yo personalmente nunca he sido militante de ninguna institución.

Si llegara al Congreso Nacional ¿No cree usted que cumplir estos tres aspectos va a ser un poco difícil?

Todos en la vida nacemos con un propósito y si Dios me permite llegar es porque lo tiene; la idea es poder luchar para que todo esto se pueda ser realidad; me han dicho que son temas delicados más cuando son temas ambientales.

Son más de 120 ambientalistas que han perdido la vida en los últimos años, el más conocido es el de Berta Cáceres; no importa si mi vida está en riesgo al luchar por un cambio en la sociedad, realmente ya no le temo a la muerte.

¿Qué propuestas tiene para combatir la deforestación del bosque?

La problemática en el medio ambiente es bastante amplia, no solo se basa en poder reforestar sino también en cuidar nuestras zonas de amortiguamiento y preservar los ecosistemas dentro de las mismas.

Se necesita una organización que haga estudios especializados en ambiente, para esto se necesita inversión; además, se debe concienciar sobre la importancia que es mantener limpia las ciudades y de la captación de agua.

Además, es importante la creación de leyes para el manejo de los desechos sólidos por parte de las empresas; otro punto sería poder recuperar el río Choluteca porque aquí se pierden miles de litros de agua que bien se podrían utilizar.

¿Cómo se ve en el futuro después de tantas situaciones que le ha tocado vivir?

Lo único que deseo en la vida antes de morirme es cumplir un proyecto; este consiste en poder realizar un evento donde pueda reunir a personas con diferentes discapacidades.

Una vez me tocó hablar con una persona que no tenía sus piernas y traté de animarla y me dijo que entendía mis palabras, pero yo tenía mis dos piernas y tenía razón no la podía ayudar.

Con que logre cumplir ese objetivo en la vida estaría más que satisfecho; poder generar el cambio y mejorarles las condiciones a mis compañeros del cuerpo de bomberos, la protección ambiental y por la igualdad de las personas con discapacidad; al lograr eso diría que hice algo bueno con esta segunda oportunidad de vida.

¿Está en alguna relación sentimental, tenía planes de casarse?

En su momento tuve una relación, pero lamentablemente eso terminó hace un año y dos meses, en este momento no tengo ningún compromiso sentimental.

Después de haber pasado un proceso difícil de más de tres años ¿en algún momento se ha arrepentido de haber entrado a los Bomberos?

La verdad es que no, en ningún momento me he arrepentido y es más siempre lo he dicho tampoco me arrepiento de haberme quemado, esto me ha cambiado por completo la vida, he aprendido que significa vivir y el valor de los pequeños detalles.

Sé que he pasado malos momentos, le doy gracias a Dios porque tengo vida y tengo la oportunidad de por lo menos poder cumplir los sueños y tratar de hacer algo bueno e importante para la sociedad, he pensado que sería lindo poder marcar una huella en la historia. 

Ever Velásquez ¿Cuál es su mensaje para la juventud de Honduras? para los jóvenes que han perdido la esperanza en cumplir sus sueños y metas.

Que no se detengan, en la vida vamos a encontrar diferentes adversidades, pero si mantenemos el enfoque en lo que queremos lograr; lo vamos alcanzar si realmente perseveramos. 

Si nosotros perdemos el miedo y no le podemos límites a las adversidades o circunstancias le vamos a encontrar solución a los problemas; tarde o temprano vamos a lograr los sueños que tenemos en la vida.