Una ensortijada cabellera gobernaba la cabeza de un enclenque Nelson Avila, quien recuerda ese atinado apodo de juventud tenía : “Era más pelo que cuerpo,ja,ja,ja,ja, pesaba 112 libras a los 20 años, es demasiado flaco, por eso me decían 'flaco',pero después sucedió todo lo contrario”.

Así, gozoso, este casi coleccionistas de doctorados de 69 años y veterano político de izquierda rememora sus años mozos. Una alegría con la disimula una dura infancia y adolescencia marcada por pobreza y la separación de sus padres.

“Por ciertas circunstancias que yo no responsabilizó a mi madre ni mi padre, muchas veces no sabía dónde iba a dormir”, dice al traer al presente esos momentos de estudiante de primera y secundaria en Comayagüela, Distrito Central, Francisco Morazán.

Pero desarrolló una fuerza de sanación interior que también le sirvió para ser parte de grupos de reivindicación social y por la vehemencia de sus reclamos, tuvo que exiliarse en México y Francia.

Ávila trabajó en varios organismos internacionales financieros, mismos que describió como “monstruos”.

“Son monstruos porque tienen un enorme poder político, económico e ideológico en el mundo”, señala al recordar que siempre adversó lo que define como las injerencia de este entidades en diferentes naciones pobres.

El experto en economía ha intentado que sus críticas sobre el estatu quo no queden en palabras y por eso ha buscado el poder.

Tiene una dilatada carrera política y en su último intento de gobernar el país fue precandidato presidencial del movimiento 5 de Julio por el partido Libertad y Refundación ( Libre) en las elecciones primarias de marzo de 2021, pero perdió frente a la ex primera dama, Xiomara Castro.

Mientras la política es una pasión para Nelson Ávila, brindar entrevistas se convirtió en un hobby, asegura. Y como parte de ese ejercicio de dar declaraciones, atendió a tunota.com para hablar de las buenas y las malas de su vida.

Doctor, recuerdo que usted estaba en organismos internacionales, pero los cuestionaba
Estuve en organismos internacionales como las Naciones Unidas, Banco Interamericano de Desarrollo, Banco Centroamericano de Integración Económica, trabajé en programas específicos con el Fondo Monetario y el Banco Mundial, estos son los instrumentos de poder a nivel global.

Por eso conozco los monstruos por dentro, creo que soy de los pocos hondureños que he sido funcionario internacional en esos organismos; los que han estado solo han sido representante de Honduras.


En mi caso, he peleado solo, sin el apoyo de nadie y así es como yo he sido funcionario en esos organismos.

¿Qué tan monstruosos son los organismos y en qué sentido?
Son monstruos porque tienen un enorme poder político, económico e ideológico en el mundo. Todas las reformas a nivel económico vienen como una receta, en primera instancia definida por el Fondo Monetario y por el Banco Mundial.Después son ejecutadas por los organismos regionales, como el Banco Interamericano de Desarrollo, Banco Centroamericano de Integración Económica, Banco Africano, Banco Asiático, Banco Europeo, ese es el primer punto de ser monstruo.

El segundo punto es que movilizan miles de millones de recursos; el tercer punto es porque ellos imponen políticas alrededor del mundo, cuarto punto es que ellos son los corresponsables de los éxitos y los fracasos.


En el mundo el resultado final ha sido un fracaso, desde el punto de vista del humano y eso se ve en estas cifras, como las que muestran que de 80 de cada 100 seres humanos antes de la pandemia ( del covid-19) eran pobres, independientemente del modelo económico y político que los ha dirigido.

 ¿Cómo logra un hondureño ser funcionario de un organismo internacional con una carrera tan dilatada? O ¿Cómo fue usted a perder trabajo ahí?
Me formé primero, todos esos cargos lo he tenido por oposición y calificación, cuando entré al BID éramos 4 mil y solo nos seleccionaron a 40; ahí no apliqué como dicen a “debo político” o partidario.

¿Tuvo algunos problemas con respecto a las sus posturas con los organismos internacionales?
Sí, por una sencilla razón :mla mayoría de los organismos están integrados por exfuncionarios de gobierno y muchos de ellos han sido catapultados, otros han sido corruptos, algunos fueron parte de gobiernos militares y llegan con esas malas prácticas. Además, hay una visión ideológica en esos organismos.

Nelson Ávila es un apasionado de la política, pero bajo el concepto de servicio social al más desprotegido. Foto: cortesía Nelson Ávila.

¿Tuvo alguna confrontación política con algún alto funcionario?
Los funcionarios llegan imponer agendas en los países, fui jefe de misión en donde yo les pedía a los gobiernos cuáles eran las prioridades en sus naciones. Me encontré con algunos que esperaban que uno mismo se las diese y eso es lamentable.

México es muy diferente en eso, normalmente ellos definen cuáles son sus prioridades y no se dejan imponer así tan fácilmente; pero a la mayoría de países de Centroamérica, algunos del Caribe y de Sur América les gusta que los organismos internacionales les definan su propia agenda.

¿Pero dentro del organismo algún funcionario con el que se haya confrontado?
Sí, porque yo también fui presidente de la Asociación de Funcionarios Internacionales en el BID; me miraban desde una perspectiva profesional y política diferente.
Trabajé en el Departamento de Planificación Estratégica y de Política, además en el Departamento de Operaciones; lo que ocurría era que algunos respondían a modelos que no eran los adecuados para los países.

¿Usted les decía que estaban equivocados?
Yo les decía que estaban impulsando esquemas de devaluación, que lo único que ayudan es a los países importadores de lo que se conoce como productos agropecuarios, pero la mayoría de los países de América Latina con los que trabajamos se dedican a la producción de estos mismos e importan productos industriales y tecnológicos.


Una devaluación va en contra de eso, porque el aumento de precios industriales y tecnológicos es mucho más proporcional de los aumentos de los precios agropecuarios, esto da como resultado transferencia de riquezas de los países menos ricos a los mayores.


Sin embargo, esa es una agenda del Fondo Monetario bajo en concepto de competitividad, ellos presionan para devaluar monedas y eso no es necesariamente correcto para los países.

En segundo punto es que hay proyectos que no son prioritarios para los países y el tercer punto es que estuve en contra de proyectos asistencialistas como lo que se desarrollan en Honduras, como con Chamba vivís mejor, eso no le genera bienestar a la gente; eso más bien lo que hace es destruir sociedades; he estado en contra de todo eso.


Yo fui el jefe del equipo que planifico la devolución de todas las propiedades sin excepción de Estados Unidos a Panamá, este las tenía desde el inicio del siglo XX y con los Tratados Tórridos Carter debían de finalizar en el año 2000.


Me tocó lidiar y ver la corrupción que se daba cuando se estaban transfiriendo algunos recursos, el mismo gobierno de Panamá hizo leyes para traspasar a sus propias personas muchos de esos activos.

¿Cuándo se retira de los organismos internacionales y por qué?
Me retiré muy joven, antes de los 50 años, todavía no tenía derechos a pensiones ni jubilaciones, me retiré porque había estado muchos años fuera de Honduras.
Había vivido en México y Francia; además, trabajé en África luego en Estados Unidos y en diversos países de América Latina y necesitaba un poco de “baño hondureño” y volví.


Me gustaría que en Honduras funcionase la “ley de la selva”, pero ni eso funciona acá.

¿Por qué?
Porque la ley de selva es bien definida, la gacela sabe hasta dónde debe de llegar, el tigre no puede pelear mucho con el león, pero en Honduras le cambia las reglas del juego y después uno no sabe qué hacer.

¿En qué año terminó su carrera en estos organismos?

Año 2000, hace 21 años, pero siempre continué a nivel internacional, pero ya como docente y coordinador de estudios de posdoctorados en la Universidad del Zulia de Maracaibo, graduamos al menos 200 estudiantes.

¿Cómo fue ese ir y venir del país para formar una familia, que tanto le repercutió?
No mucho, nos adaptamos a las condiciones, hemos vivido en países más civilizados que Honduras.


¿Le tocó mover a su familia a todos esos lugares?

Sí, siempre fue así.

Una foro de Nelson Ávila en sus tiempos de juventud. Foto: cortesía Nelson Ávila.

¿A los cuantos años tuvo  su familia?
A los 23 me moví porque comencé a trabajar en el Banco Centroamericano de Integración Económica, pero toda la familia cuando yo tenía 27 años, en ese tiempo ya contaba con los estudios de maestría y de doctorados.

¿Cuántas personas integran su familia?
En mi familia somos cinco.

¿Cuántos años lleva casado?
45 años

¿Cómo es que ese joven con colochos tipo afro enamora a su esposa?
Fuimos compañeros desde la secundaria y eso facilitó mucho las cosas; tal vez era un poquito aburrido por estar demasiado metido en los libros.

¿En qué colegio estudió la secundaria?
En el glorioso Instituto Central y también soy egresado de la Escuela Lempira de Comayagüela.

¿Usted dice que era voluminoso de pelo, pero delgado de cuerpo?
Era más pelo que cuerpo,ja,ja,ja,ja, pesaba 112 libras a los 20 años, es demasiado flaco, por eso me decían 'flaco',pero después sucedió todo lo contrario.

Usted dijo que tenía una rutina, de 12  p.m, a 6  p.m. estudiaba y después jugaba baloncesto
En la secundaria iba a clases de 7 de la mañana a 12 del mediodía, al salir hasta las seis de la tarde estudiaba y después hasta las 9 de la noche jugando baloncesto, era una buena estrategia para no almorzar y cenar, por eso era delgado. Por ciertas circunstancias que yo no responsabilizó a mi madre ni mi padre, muchas veces no sabía dónde iba a dormir.


Mi padre y mi madre se separaron cuando yo tenía una edad muy temprana; me quedé con mi papá a la edad de seis años. Pero esto me ayudó a forjar mí personalidad.

¿A veces no sabía a dónde iba a dormir?
En algún momento me tocó estar solo en Tegucigalpa, por razón de enfermedad y desplazamiento de mi padre, si tenía un lugar para dormir en donde unas tías, pero casi siempre no sabía en dónde.


Un profesor de primaria, que daba clases a los grados de quinto y sexto, me daba a dónde dormir en ocasiones. Víctor Javier Domínguez fue director de la escuela y al mismo tiempo fue mi maestro y es una persona muy especial para mí.

¿Su padre dónde vivía en ese momento? 

Él vivía en el norte de Honduras.

¿En la política también conoció algún monstruo?
Sí claro y lo estoy viendo actualmente; aunque aclaró que los de ahora son mercenarios de la política.


Al hablar con la gente, les recuerdo que la política es una ciencia, segundo que la política se basa en la ética y la justicia y en tercero la política pretende desarrollar; lo que ocurre en Honduras no es política.


Dirigen partidos políticos y han sido presidentes, pero lo que la ciencia determina en sentido estricto es que son mercenarios que se han enriquecido y controlan las instituciones del Estado para generar poder personal y dinero.

¿Cuándo comenzó en política?
Desde muy joven, fui presidente de quórum en el Instituto Central, fue también dirigente en la universidad tanto como estudiante y como profesor. Fui el que luchó por el cese de la guerra en Vietnam, por el fin de las dictaduras militares en Honduras, luchamos y apoyamos contra la dictadura de Somoza en Nicaragua, eso me generó cinco años de exilio a inicios de los 80, en México y Francia.

Con compañeros universitarios en INCAE Nicaragua en 1975 975, Nelson Ávila, de 23 años en ese momento, aparece en la tercera línea de primero de la izquierda,

¿De qué grupos formaba parte?
Formaba parte como profesor progresista y nos califican como terroristas, continúo en esta lucha política porque perdí a muchos amigos jóvenes como yo que luchaban por un mundo mejor con democracia y libertad; estos fueron torturados y sacrificados.
Entre ellos, uno de mis buenos amigos lo torturaron junto con el padre Guadalupe, él es Edwin Díaz Zelaya “el Cuco” era hermano de un jefe del Estado Mayor Conjunto y lo asesinaron junto a varios buenos amigos en el Aguacate, nunca se encontraron los restos. Por eso nunca creí en los partidos políticos.

¿Por qué se involucra en Libre si no cree en los partidos políticos?
Entendí que en Honduras para que alguien lo escuche tiene que formar parte de una organización, fui candidato independiente a la Presidencia de la República; después continuamos con esta lucha en Libre por la necesidad de reconstruir la nación.

Ya cerrando doctor, ¿Cuántas hojas tiene su currículo?
Tiene muchas,ja,ja,ja,ja, pero las puedo sintetizar en una página, pero aún así para mucha gente parece demasiado larga.

¿Piensa sacar otro doctorado?
Tengo cuatro doctorados, en educación, ciencias económicas, políticas y uno en gerencia y políticas públicas. Tengo uno que me faltó terminar la tesis en Derechos Humanos.

¿Un autor literario que sea de su afición?
Víctor Hugo porque representa a un tipo de escritor comprometido; en términos políticos a Carlos Marx el pensador del siglo XIX, juntos hacen historia en el mundo; es importante que nadie les tenga miedo a las palabras.


De los escritores actuales me gustan mucho Jorge Luis Borja que era relativamente conservador, Carlos Fuentes o Gabriel García Márquez.


Para generar conciencia hubo un libro que leí cuando era joven, a la edad de 14 años, “Así se templó el acero” de Nicolai Ostrovski, me hizo sacar muchísimas lágrimas, pero me generó temple.

Perfil de Nelson Ávila Gutiérrez 

Lugar y fecha de nacimiento : Tegucigalpa, 22 agosto, 1952
Padre: José María Ávila, ya fallecido, de oficio mecánico.
Madre: Mi madre, tengo la suerte de tenerla, ha vencido hasta el coronavirus, en su juventud fue enfermera y se llama Ana Luisa Gutiérrez.
Esposa: Lilian María Castellanos Safont-Tria, hondureña de ascendencia catalana
Hijas: Ana Luisa, Tania Libertad y Emilia.
Color: Rojo, naranja y azul turquesa.
Bebidas: el vino tinto, pero al mismo tiempo me encanta el fresco de nance.
Comida: Espaguetis al ajo.
Tiempo libre: Aventura y escribir, ya llevo cuatro libros.

Academia y cargos

  • Tiene  posdoctorados en economía, gerencia de la educación superior, ciencia política, gerencia y políticas públicas.
  • Doctorado en economía, desarrollo y finanzas internacionales
  • Experiencia superior a 25 años como funcionario o consultor internacional.
  • Ejecutivo, jefe de negociaciones y cooperación internacional e integración, estrategias y políticas, en varios países y sectores, en organismos mundiales y regionales (ONU, BID, BCIE) en Estados y sectores privados en América Latina, Estados Unidos, Francia y África.
  • Coordinador de post doctorados en economía, gerencia y políticas públicas.
  • Jefe de departamento académico.
  • Profesor universitario de post doctorados y doctorados.