Un total de 300 migrantes perdieron la vida en el 2019 en su intento por llegar a Estados Unidos, la cifra más alta de la presidencia de Donald Trump, según dio a conocer la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).

El registro de muertes se reportó durante el año fiscal 2019, que comenzó el 1 de octubre del 2018 y finalizó el 30 de septiembre del 2019.

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Las principales causas de muertes son por ahogamiento, deshidratación o hipotermia debido a las duras condiciones naturales de los diferentes tipos de terrenos en los estados fronterizos que los migrantes deben de atravesar.

En la frontera de Texas, el río Grande (río Bravo en México) se ha convertido en una verdadera trampa mortal donde docenas de migrantes han muerto ahogados.

Huyen en caravanas

Desde octubre de 2018, miles de hondureños, salvadoreños y guatemaltecos han salido en caravanas a Estados Unidos huyendo de la pobreza y la violencia en el norte de Centroamérica.

La última caravana que salió desde Honduras, en enero pasado, fue frenada por México, que desplegó a miles de agentes de la Guardia Nacional para contener a los migrantes.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha presionado a los gobiernos de México y del norte de Centroamérica para contener la corriente migratoria.