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Una hondureña relató el difícil momento que vive tras más de 60 días interna en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Gregorio Marañón de Madrid en una entrevista brindada a diario El País, de España.
Según el relato de la compatriota, ya no ve bien y tiene que volver a aprender a caminar y hace una semana le quitaron la sonda que le habían colocado en la vejiga el 21 de abril cuando ingresó a UCI.
Además, reveló que "me salvaron, y ahora me ahogan. Es un día tras otro tras otro tras otro. Fui una irresponsable", explicó.
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La hondureña explicó que nunca pensó que se contagiaría, ni cuando la llamaron para laboral en un hogar de ancianos, en Madrid, al que entró como una auxiliar de enfermería.
"Me dijeron que hacía falta, que aunque no tenía experiencia era fácil. Dije que sí a pesar del riesgo porque necesitaba trabajar, por mi hija", comentó.
Martínez, tiene una hija llamada Allison, con síndrome de Down, la pequeña de ocho años de edad vive en Honduras. La mujer salió en 2015 para trabajar en España con el objetivo de pagarle el tratamiento.
"El tratamiento por las complicaciones médicas que tiene es muy caro, y no me quedaba otra", manifestó.
Según el testimonio de Martínez, la necesidad de trabajar y la incredulidad con respecto al covid fueron dos factores que influyeron en su contagio.
"No era cuidadosa, andaba sin mascarilla. Era joven, ¿por qué me iba a contagiar? Y aquí estoy", explicó.
Martínez se convirtió en una de las estancias que han tenido en ese centro asistencial de Madrid. Según los médicos, la hondureña cuando fue ingresada no podía ni siquiera "sujetar su propia cabeza".
"Llevan tres meses lavándome con esponjas, hasta hace poco ni siquiera podía ir al baño sola. Han estado poniéndome pañales… pañales", cita el medio español.
Martínez cumple el próximo 26 de agosto, 29 años de edad y tendrá que pasarlos en una cama del hospital.
