De acuerdo con medios internacionales, Rigoberto se molestó porque su pareja no lo dejaba ingresar a su casa en Northwest Second Street en Miami, Florida.
Según el medio Local10.com, el hondureño comenzó a forcejear a su novia y luego intentó estrangularla a golpes.
Al momento del ataque habían tres menores de edad, un niño de nueve años que es hijo de la mujer; además los dos hijos de Rigoberto, una niña de 12 y un adolescente de 14.
"Los dos hijos se quedaron con un vecino a pasar la noche", dijeron las autoridades.
Canaca fue llevado hasta la corte y acusado por el delito de violencia doméstica y de un cargo de agresión por estrangulamiento.
Durante la audiencia de presentación le fue negado el derecho a fianza y quedó recluido a disposición de los agentes de inmigración, enfrentando un proceso de deportación.
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