Dentro de una casa refugio, un joven migrante hondureña murió apuñalada noche del 27 de marzo en la ciudad de Ixtepec, Oaxaca, México, a manos de hombre con el que había discutido, según informaron medios locales.

Los hechos ocurrieron cuando el esposo de la mujer andaba comprando cena. En la vivienda, situada en la calle Allende, entre Ferrocarril y Moctezuma, en el barrio San Antonio, estaban refugiados varios migrantes que presenciaron el violento ataque.

De acuerdo con algunos testigos, la hondureña identificada como Paola, cuyo apellido se desconoce, tuvo una discusión con el hombre, de nacionalidad desconocida.

Poco a poco la pelea fue subiendo de tono y el furioso hombre la atacó con violencia, empleando sus puños y luego recurrió a un arma blanca con la que le provocó heridas mortales.

El dormitorio quedó bañando en sangre debido a las puñaladas en el pecho y la garganta que le ocasionaron la muerte.

Tras el violento suceso, el agresor huyó después de lanzarse desde un segundo piso pero al caer se lesionó una de las piernas. Finalmente el agresor logró escapar cojeando a paso lento.

Gracias a una llamada anónima los policías lograron dar con el paradero del hombre, quien estaba lleno en sangre.

El agresor fue entregado a la Fiscalía para enfrentar cargos por feminicidio, un delito grave que, de ser hallado culpable, podría conllevar una pena de hasta 40 años de prisión.

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