Una hondureña fue captada caminando en plena recuperación por una cesárea y con su hijos en brazos cuando caminaba por la frontera entre Guatemala y México con el objetivo de llegar a Estados Unidos.

La compatriota identificada como María Argueta contó a Univisión que su hijo tiene 40 días de nacido. Ella viaja junto a un grupo de migrantes centroamericanos.

"Me paré porque el niño se me puso bien 'moradito' y una señora me ayudó", dijo cuando recordó las dificultades por las que ha pasado en la larga travesía.

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Al ser consultada del porqué corrió el riesgo de viajar rumbo a Estados Unidos con su hijo recién nacido, la hondureña aseguró que se vio obligada por "la situación".

"Siento como fuego, me arde. No siento ni el pavimento", expresó Jhony Jimmynson, primo de la compatriota.

Los migrantes dijeron estar conscientes de que en Estados Unidos están deportando cientos de personas, sin embargo, están aferrados a la "voluntad de Dios" que ellos alcanzarán el mal llamado "sueño americano".

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