La Administración de Donald Trump, presidente de Estados Unidos, extendió el jueves (31.12.2020) las prohibiciones a solicitantes de residencia permanente a través de las Green Card (tarjetas verdes) que otorgan visas de trabajo y estudio a extranjeros en el país.

El mandatario, quien el 20 de enero dejará su cargo al presidente electo Joe Biden, argumentó que estas medidas protegen a los trabajadores estadounidenses en una economía golpeada por la pandemia del coronavirus.

Las prohibiciones que se lanzaron por primera vez en abril de 2020 y se renovaron en junio, deberían caducar el 31 de diciembre, pero se extenderán hasta el 31 de marzo de 2021.

Esta es la última medida en materia migratoria que ha tomado la actual Administración antes de abandonar la Casa Blanca.

Joe Biden ha criticado las restricciones, pero no ha dicho si las anularía inmediatamente al inicio de su presidencia.

Un juez federal de California bloqueó en octubre la prohibición de Trump a los trabajadores extranjeros invitados, ya que afectaba a cientos de miles de empresas estadounidenses que se opusieron a la política en los tribunales.

En marzo, el presidente Trump firmó la orden que suspende la emisión de visas H-1B, H-2B, H-4, L-1.

Así como algunas visas J-1, poniendo como excusa la pandemia, pues el gobierno había restringido el ingreso de extranjeros al país.

La medida afectaría sobre todo a las visas H-1B otorgadas cada año a unos 85 mil empleados "calificados y especializados", entre ellos ingenieros, especialistas en datos o desarrolladores contratados por grandes empresas del país.

Ahora bien, con la extensión de la orden por parte de Trump, el presidente Biden podría suspenderla una vez que comience su Administración.

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