Erika Mejía es una hondureña que salió del país en busca de nuevas oportunidades que le permitieran alcanzar el famoso “sueño americano” para el bien de ella y su familia, algo que logró a base de esfuerzos y sacrificios.

La compatriota compartió su historia con tunota.com, donde reveló cuál es la clave del éxito en su negocio de rosas que ahora adquieren hasta los famosos.

Erika, quien reside en Miami, Estados Unidos, país al que llegó en 2006 cuando tenía 19 años edad, con su maleta llena de sueños y repleta de expectativas, sin embargo, cuando llegó solamente contaba con 200 dólares (4 mil 900 lempiras).

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Sus ganas de trabajar y alcanzar el éxito, hicieron que la hondureña pasara por diferentes empleos. Fue desde ser secretaria, empleada doméstica, vendedora y ayudante en tiendas.

No obstante, la hondureña sabía que su futuro estaba más allá de eso, por lo que tomó la decisión de aprender el oficio de la floristería, desde ese momento su amor por las rosas se convirtió en su pasión.

"Mi corazón lleno de sueños, esperanza y muchas ganas de trabajar, desde el principio siempre me propuse ser mi propia jefa y vaya que fue difícil lograrlo", explicó la catracha.

Los arreglos que Erika realiza son coloridos y finos. Foto: Cortesía Erika Mejía.

Lovely Roses, la marca de los famosos

Tras su arduo trabajo y disciplina, Erika Mejía, alcanzó el sueño de ser su propia jefa y fundó su propia tienda de flores y rosas llamada “Lovely Roses”, marca con la que ha alcanzado posicionarse, siendo una de las más importantes en Miami.

Demi Lovato, Karol G, Luis Fonsi, Camila Cabello, Anuel AA, Maluma y Thalía, son algunos de los nombres que han confiado en el arte de las rosas de la catracha.

"Acá estoy dispuesta a motivar a otros con mi ejemplo de perseverancia, constancia y trabajo duro", dijo.

La compatriota es considerada como la reina de las flores. Foto: Cortesía Erika Mejía.

Erika es reconocida por los productos de calidad que les brinda a sus clientes, la compatriota hondureña utiliza una técnica de larga duración para la conservación de las rosas que pueden durar hasta tres años intactas.

A través de sus redes sociales la hondureña comparte el arte con el que ha logrado ser considerada como una de las floristas más capacitadas y profesionales, según indica.

Uno de sus clientes es el reguetenero Maluma, quien en más de una ocasión ha confiado en el trabajo de la hondureña. Foto: Cortesía Erika Mejía.

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