Un grupo de vecinos de un condominio en Hialeah, la segunda ciudad más grande del condado de Miami-Dade, protestó el martes por el mal olor que emana un contenedor donde se almacenan cadáveres pertenecientes a una casa funeraria.
La casa de sepelios tiene un contenedor y refrigeradores donde se almacenan a los fallecidos, método que está en concordancia con la ley.
Por su parte, la municipalidad de Hialeah confirmó que la funeraria no está incumpliendo con ninguna regla de salubridad.
''Hemos llegado a un punto triste. Lo dije hace semanas, si no cambiaban la manera en la que se hacen las cosas íbamos a llegar a este momento. Nuestros hospitales están a tope, nuestras funerarias ahora están así (…) He hablado con la funeraria para ver si podemos mover el tráiler un poquito hacia adentro para tener un poco más de distancia'', dijo al respecto el alcalde de Hialeah, Carlos Hernández, en una conferencia de prensa reciente.
Las autoridades quieren tomar el caso de la funeraria como un llamado de advertencia para que la población tome consciencia de la gravedad del covid-19 en el sur de la Florida.