La justicia de los Estados Unidos informó el lunes que se está investigando una estafa en la venta de más de 39 millones de mascarillas destinadas al personal médico que combate el covid-19 en los centros hospitalarios, y que habían sido gestionadas por el sindicato SEIU - United Healthcare Workers West, de California, según medios locales.

Según datos oficiales, el pasado 26 de marzo, el sindicato había anunciado que se habían obtenido las mascarillas solicitadas a varias instituciones. Sin embargo, días después, personal médico de distintos centros de salud denunció que no se les habían entregado. Incluso, un vocero del consorcio Kaiser Permanente expresó que el proveedor no pudo brindarles ninguna "información confiable" sobre "dónde podrían verificar e inspeccionar el envío".

Ante esta investigación, el fiscal federal del Distrito Oeste de Pensilvania, Scott Brady, expresó que están trabajando de interceptar el alto número de mascarillas y así poderlas destinar a la Agencia Federal de Manejo de Emergencias.

Según detalla el portal de RT, las primeras investigaciones llevaron a los agentes hasta un empresario en Pittsburgh, Pensilvania, quien afirmó que trabajaba de la mano junto al sindicato para conseguir los artículos.

También dijo que había estado en contacto a través de WhatsApp con un proveedor de Kuwait y con un corredor de Australia, quien le dijo que 2 millones de las máscaras estaban en un depósito de Georgia. Ambos están ahora bajo investigación.

"Hay oportunistas que están buscando una víctima", dijo Brady, además, indicó que el empresario de Pittsburgh y el sindicato de California serían parte de la cadena de intermediarios que fueron engañados, por lo que, no están entre los sospechosos.

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