El servicio de la deuda de los países más pobres quedará suspendido por 12 meses para ayudarlos a atravesar la crisis causada por la pandemia de coronavirus, informó este miércoles el ministro saudita de Finanzas, Mohammed al-Jadaan, luego de una reunión virtual del G-20.
"Tenemos un compromiso claro, por intermedio de las organizaciones internacionales como el FMI y el Banco Mundial. Esta suspensión es un anuncio realmente importante que significa que los países pobres no deben preocuparse por sus vencimientos durante los 12 meses venideros", declaró en rueda de prensa. La suspensión es efectiva "inmediatamente", agregó.
Según el ministro, esta iniciativa aportaría una liquidez inmediata de cerca de 20 mil millones de dólares que los países pueden usar para sus sistemas de salud y para apoyar a las personas afectadas por el covid-19.
Muchos gobiernos crearon planes masivos de ayuda económica a empresas y personas por miles de millones de dólares para mitigar el impacto del coronavirus, que paralizó la economía mundial.