Manuel Merino, quien había sido nombrado presidente de Perú el 10 de noviembre, anunció el domingo su dimisión "irrevocable" a la presidencia del país e instó a la "paz y la unidad", un paso que abre camino a la solución de la profunda crisis política que afronta la nación, tras múltiples protestas violentas por el anuncio de su nombramiento.

Merino anunció su dimisión en un mensaje televisado a la nación, apenas minutos después de que el Congreso exhortara al mandatario a renunciar mientras convocaba a un pleno extraordinario para encontrar una salida constitucional a la crisis y hallar un sucesor al presidente dimisionario.

El anuncio de la dimisión fue recibido con algarabía y aplausos en las calles, donde miles de ciudadanos proseguían con las protestas para pedir su salida del Palacio de Gobierno.

Luego que varios sectores se volcaran a las calles, dos estudiantes que protestaban exigiendo la dimisión del mandatario perdieron la vida a manos del poder policial, denunciaron defensores de derechos humanos.

El mandatario había jurado "por Dios, la patria y todos los peruanos" que ejercería "fielmente el cargo de presidente de la República para completar el cargo del periodo 2016-2021" para el que fue elegido originalmente el expresidente Pedro Pablo Kuczynski.

A Kuczynski, quien renunció al cargo después de ser denunciado por vínculos con la empresa brasileña Odebrecht, le sucedió su vicepresidente Martín Vizcarra en 2018, quien el lunes fue destituido por el Congreso por "incapacidad moral permanente" a raíz de una denuncia de presunta corrupción cuando fue gobernador regional hace seis años.

Le puede interesar: El Congreso peruano destituye al presidente Martín Vizcarra