Miles de salvadoreños salieron el lunes 30 de marzo, en plena cuarentena obligatoria en busca de un bono estatal de 300 dólares, otorgados por el gobierno del presidente Nayib Bukele, para afrontar la crisis del coronavirus (covid-19) que se vive en El Salvador.

Los ciudadanos, entre ellos adultos y personas de la tercera edad, se hicieron presentes a las sedes del Centro Nacional de Atención y Administración de Subsidios (Cenade), en busca del bono.

En las aglomeraciones, hubo algunos conflictos por la gran afluencia de personas, ya que no se lograba que se guardara la distancia de dos metros recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Algunas sedes del Cenade, como la de la capital San Salvador, tuvieron que ser cerradas por la gran cantidad de personas que no respetaron los protocolos de seguridad sanitaria.

El pasado domingo, el presidente Bukele anunció un sitio web en donde las personas podían buscar si aparecían como beneficiadas del subsidio gubernamental, como método de que solo las personas que necesitan del bono sean beneficiadas.

De acuerdo con las proyecciones del gobierno de El Salvador, el bono alimenticio de 300 dólares le representará al Estado una inversión de al menos 450 millones de dolares.

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