Lo anterior, es en respuesta a una propuesta de Petro de un "foro internacional" para comparar las experiencias de ambos países con respecto a la reducción de homicidios, luego de que Bukele le deseara que la nación andina bajara esos índices.

"Nuestra experiencia: De más de 100 homicidios por cada 100,000 habitantes, ahora estamos en cifras de un solo dígito. Y la reducción fue rápida, porque los muertos no se recuperan", publicó Bukele.

Más temprano, Petro aseguró en un acto de Gobierno que se pueden ver en redes "las fotos terribles -no me puedo meter en otros países- del campo de concentración de El Salvador, lleno de jóvenes, miles y miles, encarcelados que le da a uno escalofríos".

Esto en referencia a que el Gobierno de Bukele trasladó al Centro de Confinamiento del Terrorismo (una cárcel de máxima seguridad para 40,000 presos) a 2,000 supuestos pandilleros.

Al respecto, el presidente salvadoreño le dijo a Petro que "los resultados pesan más que la retórica".

"Deseo que Colombia en realidad logre bajar los índices de homicidios, como lo hemos logrado los salvadoreños. Dios los bendiga", publicó Bukele en Twitter.

Traslado de presos

En imágenes publicadas por el Gobierno salvadoreño en los últimos días se observa a los presos, sin camiseta, con los tatuajes característicos de las pandillas.

"Yo creo que hay gente que le gusta eso, indudablemente, ver a la juventud dentro de las cárceles y creen que eso es la seguridad y se disparan las popularidades, indudablemente", aseguró Petro.

Agregó que "el presidente de El Salvador se siente orgulloso porque logró reducir la tasa de homicidios a partir, dice él, de un sometimiento de las bandas que hoy andan en esas cárceles, en mi opinión, dantescas".

El Salvador se encuentra desde marzo de 2022 bajo un régimen de excepción, que suspende garantías constitucionales, tras una escalada de homicidios generada.

Según una investigación del medio local El Faro, las acciones se dieron luego de una supuesta ruptura de un pacto con las pandillas.

Vea además: Video: así fue el traslado de 2.000 pandilleros a nueva mega cárcel en El Salvador