En el intrigante mundo de Griselda Blanco, conocida como 'La Madrina', 'La Viuda Negra' o 'La Reina de la Cocaína', la pregunta sobre su relación con una novia ha desconcertado a sus seguidores. A pesar de insinuaciones en documentales y series, no hay pruebas que respalden la existencia de esta pareja femenina.

La vida de Blanco estuvo marcada por la crueldad y la implacable búsqueda de poder en el peligroso escenario del narcotráfico colombiano. Aunque se sugiere que su insensibilidad se debía a su experiencia brutal, teorías en internet especulan sobre sus necesidades sexuales, afirmando que buscaba satisfacción constantemente, ya sea con hombres o mujeres.

¿Griselda Blanco y su novia?. Foto: Redes sociales.

Entre las historias que rodean a Griselda, se cuentan anécdotas que añaden un toque aún más oscuro a su figura. Desde exigir sexo oral bajo amenaza de pistola hasta relatos de decapitaciones de amantes, estas narrativas, aunque posiblemente apócrifas, contribuyen a forjar una imagen sanguinaria en torno a su persona.

Incluso en su vida cotidiana, Griselda Blanco desafiaba límites. Llegó a llamar a su perro, un pastor alemán, con el nombre de Hitler. Este gesto anecdótico refleja la compleja personalidad de una mujer que dejó una huella indeleble en la historia del crimen.

¿Griselda Blanco y su muerte?

Quién mató a Griselda Blanco?, a las tres de la tarde de aquel lunes en Medellín, Griselda ingresó a una carnicería del barrio de Belén. Durante aproximadamente 30 minutos, seleccionó cuidadosamente la carne que llevaría para la semana.

El matarife, encargado de llevar la cuenta que ascendía a casi 120 euros, estaba a punto de concluir el despacho del pedido de la mujer cuando, de manera repentina, resonaron dos disparos, hasta la fecha se desconoce la identidad de los sicarios.

¿Griselda Blanco y su novia?. Foto: Redes sociales.

Griselda, ahora yacía en el suelo, víctima de un ataque perpetrado por dos sicarios que le habían disparado en la cabeza, para luego huir velozmente en una motocicleta.

De esta manera concluyó la vida de Griselda Blanco, conocida como La reina de la coca y La Madrina. Se trataba de una mujer de 69 años que fue responsable de 250 homicidios en Colombia.

Entre las décadas del 70 y 80, acumuló una fortuna incalculable traficando cocaína desde Colombia hacia Estados Unidos. Similar al fallecido capo Pablo Escobar, Blanco exhibía un repertorio de excentricidades en su carrera criminal.