En diciembre de 1987 se realizó la primera Teletón en Honduras con el decidido impulso que le imprimió a través de Televicentro, Emisoras Unidas, el visionario empresario de las telecomunicaciones, don José Rafael Ferrari.
Y este milagro de amor fue todo un éxito. No solo porque se superó la meta propuesta, sino porque la Fundación Teletón, con personería jurídica desde entonces, hace ya más de 30 años, se ha constituido en la esperanza de miles de personas de todas las clases sociales, con algún grado de discapacidad.
Personas que no solo han recuperado sus habilidades, sino que han mejorado significativamente su calidad de vida de forma permanente. Sin fines de lucro y con una inmaculada trasparencia en el manejo de los fondos procedentes de las recaudaciones que anualmente hace el pueblo hondureño a esta noble causa.
Teletón, bajo la égida de don Rafael Ferrari, se convirtió en el baluarte y sigue siendo un baluarte indiscutible para aquellos compatriotas que por alguna causa han quedado limitados, físicamente.
Este 12 de diciembre, se cumple el primer año del desaparecimiento físico de don Rafael Ferrari. Pero su gran legado permanece y permanecerá incólume en el devenir de los años.
Porque la Fundación Teletón a la que él se entregó de manera incondicional, de manera decidida, de manera permanente, para que fuera la tabla de salvación para quiénes se creía que no tenían ninguna alternativa siga adelante.
Gracias precisamente a la solidaridad del pueblo hondureño y a las empresas patrocinadoras, que estamos seguros, que se volverá a materializar este próximo 2019.
Además: La emotiva carta de Rafael Ferrari en la Teletón 2018