“Ir y jugar”, fueron las dos instrucciones que Jonathan Michael Batiste, más conocido como Jon Batiste, siguió cuando, con apenas 6 o 7 años, se puso a tocar los tambores de conga de la Batiste Brothers Band. Según relató a la Rolling Stone, ese es su “primer recuerdo musical”.

El resto, es historia. Ese joven nacido el 11 de noviembre de 1986 en Metairie, Louisiana, llegó al mundo con la música en sus venas. Y es que el suyo era un linaje de católicos y luchadores contra la segregación racial… y de músicos. Y él, desde pequeño, estaba destinado a seguir también ese camino.

“He querido ser un intérprete desde siempre. Y creo que gran parte de mi desarrollo estuvo en descubrir qué era lo que yo quería decir”, dijo en una entrevista a la revista Forbes. Un desarrolló que comenzó muy temprano.

Lea: Jon Batiste arrasa en unos Grammys que dieron espacio a Zelenski

A los 11 empezó a tocar el piano combinando el aprendizaje en música clásica con la transcripción de bandas sonoras de videojuegos. A los 17 lanzó su debut en estudio, “Times in New Orleans” (2005).

Y, mientras estudiaba en la Juilliard School, conoció a los compañeros con los que formaría la banda “Stay Human”, con quienes participa en el programa “The Late Show with Stephen Colbert”.

Licenciado en Música y con un Máster, Jon Batiste se especializó en el jazz durante sus estudios. Pero como músico, ha ido más allá, mezclándolo con otros géneros: R&B, Soul, Rap y Hip-Hop, Rock, Pop… Ofreciendo una música de fusión que acumula millones de reproducciones en youtube.

Porque para él, “la música es una forma auténtica de conexión con un poder superior en su máxima expresión. Una forma de comunidad que ha unido a las personas otorgándoles un propósito común”, según explicó en la revista Forbes.

Lenguaje universal

Así, Batiste cree que “la música es un lenguaje universal”, tal y como afirmó también en una entrevista con Atwood Magazine, donde también explicó que “la música habla con nuestro subconsciente y nuestras emociones”.

Por eso, sus influencias musicales son variadas. Para Jon Batiste “la música es espiritual” y por eso, sus referentes son: “los grandes artistas. De Bach a Nina Simone o Miles Davis o Stevie Wonder”, y menciona también a John Coltrane.

Además: Bad Bunny y Juanes ganadores de los Grammy en las categorías latinas

Con Stevie Wonder ha tenido la oportunidad de colaborar, y también con otros artistas y músicos de la talla de Ed Sheeran, Prince, Mavis Staples, Roy Hargrove, Lenny Kravitz, Willie Nelson, Cory Wong, Bill Laswell o Chad Smith. Porque, ante todo, ha sido un compositor experimental y muy prolífico.

Su discografía cuenta ya con varios álbumes de estudio, que además de “Times in New Orleans” (2005) son: “Jazz Is Now” (2013), “Social Music” (2013) -junto a su banda Stay Human-, “The Process” (2014), “Christmas with Jon Batiste” (2016), “Hollywood Africans” (2018), “Meditations” (2020) y el recientemente galardonado “We Are” (2021).

Además, es el autor de “Soul” (2020), la también galardonada banda sonora de la película homónima de Disney Pixar. Y tiene un total de cinco discos en directo: “Live in New York: At the Rubin Museum of Art” (2006), “The Music of John Lewis” (2017), “Chronology of a Dream: Live at the Village Vanguard” (2019), “Anatomy of Angels: Live at the Village Vanguard” (2019) y “Live at Electric Lady” (2021).

En cuanto a su vida personal, Batiste se casó en febrero de este mismo año con Suleika Jaouad, autora del libro “Between Two Kingdoms: A Memoir of a Life Interrupted” en el que relata su lucha contra la leucemia. De hecho, la pareja se dio el “Sí, quiero” justo un día antes de Suleika ingresase en el hospital para someterse a un trasplante de médula ósea.

 “Quiero que quede claro que no te propongo matrimonio por este diagnóstico, me ha llevado más de un año el diseño de tu anillo”, le había dicho Jon a su mujer, según relató ella misma: “entramos en la unidad de trasplante en una nube, felices y rebosantes de amor y optimismo”, dijo Jaouad a CBS Sunday Morning.

Jon Batiste

Oscar y Grammys

A pesar de su amplia trayectoria, Jon Batiste era un músico de perfil relativamente bajo y discreto en comparación a las grandes estrellas, especialmente fuera de Estados Unidos… Hasta ahora, que ha comenzado a brillar como una celebridad más gracias a su triunfo en los Grammys.

Ya había tenido lugar un preludio cuando Batiste se hizo con el Oscar a Mejor Banda Sonora Original en 2021 gracias a “Soul” (la película de Disney Pixar) convirtiéndose así en el segundo compositor de color en conseguir la estatuilla dorada para dicha categoría. Algo que no ocurría desde 1986, cuando Herbie Hancock hizo lo propio por la BSO de “Round Midnight”.

Pero el presagio llegó cuando se revelaron los nominados a los Grammys: “¡Dios mío, gracias! ¡Os amo! Me siento muy agradecido con mis colaboradores y ancestros”, dijo en noviembre a través de Twitter al enterarse de las 11 nominaciones que le ponían en cabeza.

Y el éxito fue todavía mayor durante la ceremonia, al hacerse con 5 premios: Mejor Banda sonora para efectos visuales (“Soul”), Mejor Videoclip (“Freedom”), Mejor Actuación de raíces americanas (“Cry”), Mejor Canción de raíces americanas (“Cry”) y, por supuesto, Mejor Álbum del año por “We are”.

Jon Batiste

“Sentí que era algo que Dios me había hecho llegar para que lo dijera en la canción” había dicho Jon Batiste a Atwood tras el lanzamiento del álbum, en referencia a la canción homónima que, según el artista, “en el futuro habrá mucha gente cantándola, como un himno”.

Te puede interesar: Víctor Reyes, el niño hondureño que debutó en una Alborada a la Virgen de Suyapa y sueña con ganar tres Grammys

Y no se equivocó ni con la canción, ni con el disco entero. Un trabajo que, para ese galardón a “Mejor Álbum del año”, competía con “Sour”, de Olivia Rodrigo; “Justice”, de Justin Bieber; “Montero”, de Lil Nas X, “Planet Her”, de Doja Cat, “Donda” de Kanye West, “Evermore” de Taylor Swift, “Love for Sale”, de Tony Bennett, "Back of My Mind” de H.E.R. y “Happier Than Ever” de Billie Eilish.

“Admiro a todos estos artistas”, dijo el vencedor al recoger su galardón: “Creo en lo más profundo de mi corazón que no hay mejor músico, canción o actor. El arte es subjetivo y se encuentra con la gente cuando más lo necesita”.