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Un anciano de 74 años de edad se enterró vivo en el patio de su casa como forma de protesta por las precarias condiciones en las que vive en su rancho en Bogotá, Colombia.
El hombre identificado como Miguel López tenía como objetivo llamar la atención de sus hijos y el gobierno de su país para que lo ayuden a salir de la "miseria" en la que se encuentra.
De acuerdo con lo que él explicó al medio local El Tiempo, en su casa, la cual construyó a base de pedazos de madera y lata, carece de los servicios básicos como agua, luz y comida.
El señor es muy conocido en su comunidad por la pobreza extrema en la que vive. Además, por la soledad en la que ha ido quedando desde hace un tiempo.
Según don Miguel, sus hijos le dicen que no lo pueden ayudar debido a que ellos tienen "sus propios problemas" los cuales están encabezados por la falta de oportunidades laborales.
Además contó que él trabajaba y se mantenía, pero luego de que un hombre le robara su material de trabajo y lo apuñalara, sus condiciones de vida cambiaron. De la misma forma el anciano de 74 años dijo que había asistido a la Secretaría de Integración Social para que lo ayudaran; sin embargo, lo ignoraron.
Ya se había enterrado
El pasado martes personal de la Secretaría de Integración Social de la alcaldía de Bogotá se enteró del entierro de Miguel López y acudió a desenterrarlo. Posteriormente, lo llevaron a un hospital donde revisaron su estado de salud.
Sin embargo, cuando salieron de la consulta médica, el hombre de 74 años volvió a enterrarse.
Miguel optó por cavar su propia tumba dentro de su vivienda, como lo manifestó. Abrió un hueco en la tierra de su patio y terminó metiéndose en él. Luego comenzó a vaciarse la tierra encima hasta que finalmente quedó tapado todo su cuerpo a excepción de su cabeza que quedó al descubierto.
