42 mil capitalinos están en peligro en la capital de Honduras.

Son 55 colonias en riesgo por inundaciones y 46 por deslizamientos en el Distrito Central, lo que implica 41,255 personas expuestas, según la alcaldía capitalina.

Las colonias que necesitan mayor atención por deslizamientos son: Villanueva sur y norte, Alto de los Pinos, Los Pinos, Nueva Suyapa y El Tablón.

Mientras que por inundaciones las más expuestas son: Las Brisas y Betania, Nora de Melgar, Kuwait, Rivera de la Vega y Bajos de Miramesí.

”El objetivo es salvaguardar la vida de las y los capitalinos ante la presencia del fenómeno tropical Julia", dijo el alcalde Jorge Aldana.

"Estamos tomando todas las medidas e identificando los puntos de mayor riesgo”, añadió, para dar la atención a los 42 mil capitalinos.

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Respuesta

La alcaldía dividió el territorio capitalino en cuatro cuadrantes.

El objetivo es que en cada zona se tenga presencia de equipos de atención y de primera respuesta.

En cada una estará personal de respuesta de las instituciones de socorro como Cruz Verde, Cruz Roja, Bomberos de Honduras.

Además, la Secretaría de Estado en Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco), Fuerzas Armadas y de la municipalidad.

Los distritos se distribuyen en los cuatro puntos cardinales: noroeste, suroeste, sureste y noreste.

Esos distritos cubren 76 barrios y colonias de mayor vulnerabilidad por deslizamiento de laderas.

“Dividir en cuatro cuadrantes la ciudad es disponer de equipo operativo y dar respuesta a los ciudadanos de manera expedita en las zonas críticas ante las lluvias”, concluyó Aldana.

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Monitoreo y atención

Lo único que queda por hacer es el monitoreo de las zonas que tienen afectaciones, dijo a tunota Maynor Ruíz, geólogo de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).

El área de la quebrada de El Sapo es una zona en la que generalmente el cauce se desborda e inunda los barrios circundantes.

En la colonia Guillén esa masa se va a mover más y va a afectar un área que ha sido delimitada por la municipalidad.

Además, "en las zonas que hay evidencia de deslizamientos probablemente se van a continuar moviendo”, advirtió el experto.

Ante la emergencia y lo que falta por venir hasta el 30 de noviembre, que es la fecha cuando termina la temporada de huracanes, lo que puede hacer la alcaldía es un inventario de las zonas de riesgo.

“Hacer el inventario de esas zonas afectadas para que cuando finalice el período de lluvias comiencen a hacer obras de mitigación”, señaló Ruiz.

Estas obras de mitigación, según expertos, tienen que venir acompañadas de estudios o nueva información, porque una obra estructural de mitigación no tiene sentido en este momento.