La exrectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, envió una carta a la presidenta de la República, Xiomara Castro, lamentando el reintegro de policías, separados en el último proceso de depuración.

"Esta política de seguridad fue la misma del expresidente (José Manuel) Zelaya el año 2007, y no tuvo resultados positivos. Las muertes violentas pasaron de 2,417 el año 2005 a 5,265 el año 2009 (ONV-UNAH)", dice el escrito.

La académica enunció que esta decisión de la actual administración refleja un irrespeto a las víctimas de "una policía coludida e infiltrada por criminales".

Para Castellanos dicho reintegro muestra un desconocimiento de la historia reciente y un desprecio al trabajo realizado por quienes dirigieron el proceso mencionado.

"Imposible que las unidades de inteligencia y contra inteligencia
no conociera las actividades ilícitas referidas", manifiesta la proclama.

"Las decisiones en este tema, como en otros, no pude ser resultado de la improvisación, la ocurrencia, la ligereza, ni compromisos políticos partidarios. Sorprende el entusiasmo de las autoridades de la Policía con esta decisión", añade la carta de Castellanos.

Finalmente la exrectora elogió la actuación del Gobierno frente al asesinato de tres agentes policiales en Colón, pero espera que se muestre el mismo interés en el resto de masacres que van en el año, para evitar que el mensaje de la administración sea que "depende de quiénes sean las víctimas".

  • Carta íntegra

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Depuración policial

En 2016, mediante el decreto N. 21-2016, el Congreso Nacional declaró situación de emergencia por seguridad y creó la Comisión para la Transformación y Depuración de la Policía Nacional.

Dicha misión integrada por el exministro de Seguridad, Julián Pacheco; Omar Rivera, Vilma Morales y Alberto Solorzano, estuvo a cargo de la depuración de más de 3,300 efectivos presuntamente vinculados al crimen organizado.

Reintegro de policías depurados

El director de la Policía Nacional, Gustavo Sánchez, anunció que reconcentrarán a cerca de 2 mil agentes depurados sin relación comprobada con el crimen organizado.

La decisión es impulsada para fortalecer la institución frente las elevadas cifras de inseguridad y violencia en los primeros meses del Gobierno encabezado por la presidenta Xiomara Castro.

Por ello, la Secretaría de Seguridad estará revisando los expedientes de al menos 2 mil policías separados durante el gobierno del exmandatario Juan Orlando Hernández, por supuestos actos de corrupción.

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