El expresidente de la República (2010-2014), Porfirio Lobo Sosa, reveló este domingo que la Embajada de los Estados Unidos está investigando el asesinato de su hijo en la masacre de cuatro jóvenes la madrugada del pasado 14 de julio del 2022 cuando salían del estacionamiento de un edificio comercial en la capital.

"No se que pasó con mi hijo, estoy esperando que la autoridad nos indique, Said (hijo) era norteamericano por lo tanto recibí una llamada de la Embajada Americana solidarizándose y además de eso indicándome que ellos iban a participar y que iban hacer su investigación que es lo que hacen cuando le sucede algo a un ciudadano norteamericano en cualquier lugar del mundo", expresó Lobo en el programa 30/30 de Televicentro.

Cabe destacar que tras la ejecución de los jóvenes que enlutó a sus familias, trascendió en redes sociales que Said Lobo, habría nacido en el estado de Luisiana, Estados Unidos.

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Además agregó: "Debo agradecer al general Sabillón me reuní con él y hablamos bastante y yo estoy esperando que ellos sean los que nos brinden la información de que fue lo que pasó, independientemente de lo que pasó que fue una ejecución terrible ver esos vídeos para un padre es duro".

Asimismo, el expresidente aseguró que todavía no sabe para quién iba dirigido el ataque de los responsables de la masacre.

"No sabemos todavía, estamos esperando el resultado de las investigaciones y yo lo que quiero es que se encuentre a los verdaderos culpables de ese hecho y que reciben el castigo correspondiente, es lo más que podemos esperar".

Finalmente Lobo agradeció el interés del gobierno de Estados Unidos por esclarecer la muerte de su hijo.

"Saber que tanto la justicia nuestra más lo que puede significar de alguna manera el interés que tiene el gobierno americano en esto pueda esclarecer lo que pasó con mi hijo".

Masacre en Tegucigalpa

La madrugada del jueves 14 de julio se suscitó una masacre que dejó cuatro personas fallecidas en la salida de un edificio comercial ubicado en el bulevar Morazán, de la capital.

Los muertos fueron identificados como Said Lobo (hijo del expresidente Porfirio Lobo Sosa), Luis Zelaya (sobrino del exgeneral Romeo Vásquez), Norlan Rodríguez (conductor de Said) y Salomón Vásquez (sobrino del diputado Walter Chávez).

Las víctimas fueron interceptadas cuando se transportaban en dos vehículos y se aprestaba a salir del estacionamiento, luego departir en una discoteca que encuentra ubicada en el edificio.

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