Así las cosas, la medida terminará el 6 de octubre para atacar las diferentes modalidades criminales, especialmente la extorsión y el trafico de drogas.

"Se trata de una extensión de seis meses durante los cuales vamos a estar trabajando con este ejercicio de seguridad ciudadana como equipo, para dar respuesta a toda esa masa y a todas esas propuestas y necesidades de seguridad de la población", declaró el ministro de Seguridad, Ramón Sabillón en una conferencia en Casa Presidencial.

La determinación se adoptó en reunión del Consejo Nacional de Defensa y Seguridad que dirigió la presidenta Xiomara Castro en la sede del Ejecutivo, en Tegucigalpa.

Honduras ha estado bajo estado de excepción desde el 6 de diciembre de 2022, luego de tres extensiones de esta estrategia.

"Vamos a estar trabajando con este ejercicio de seguridad ciudadana como equipo, para dar respuesta a toda esa masa y a todas esas propuestas y necesidades de seguridad de la población", declaró.

"Esto viene a llenar estos espacios, vamos a seguir ocupando las fuerzas del orden, para garantizar la paz y la seguridad de la ciudadanía", añadió Sabillón.

¿Qué es el estado de excepción?

El estado de excepción en Honduras tiene como propósito combatir la criminalidad organizada y, sobre todo, la extorsión, según el planteamiento del Gobierno.

Esta medida, alabada por unos y criticada por otros, contempla la suspensión de las garantías ciudadanas establecidas en los artículos 69, 78, 81, 84, 93 y 99 de la Constitución de la República.

Las garantías suspendidas son libertad de circulación, derecho de asociación y reunión, e inviolabilidad del domicilio

VEA: Estado de excepción, 'reconocimiento del fracaso del Estado de derecho': Julieta Castellanos