El presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Rolando Argueta, detalló este martes que se entregaron alrededor de 1,200 acuerdos a personal del Poder Judicial que estaba por contrato y que ahora serán empleados permanentes.

Según Rolando Argueta, quien vacará de su cargo a finales de enero de 2023 tras siete años, estos acuerdos fueron entregados hasta hoy debido se se tenían que culminar procedimiento engorrosos" por las pruebas que se tienen que aplicar.

"La estabilidad de los empleados es una condicionante importante para cualquier institución pública o privada, por eso, existiendo en el Poder Judicial cientos de empleados en categoría de contratos interinos, hemos tomado la decisión de reconocerles ese trabajo formándolos, en el marco de un proceso de selección, los acuerdos apropiados para que adquieran los derechos y la estabilidad necesaria", dijo Argueta a periodistas.

Al mismo tiempo se refirió a la acreditación y reacreditación de 39 organismos judiciales que, a su criterio, volverán un Poder Judicial más colegiado.

"La acreditación y reacreditación que hemos hecho y el anuncio de más órganos en cantidades importantes es una exigencia imponderable e indiscutible en el Poder Judicial", señaló.

Satisfacciones e insatisfacciones

Antes de asumir como presidente de la Corte, Argueta fungió como director de Fiscalías del Ministerio Público de 2013 a 2016.

Tras siete años como titular del Poder Judicial, Rolando Argueta indicó que hay satisfacciones e insatisfacciones, algunas como las de haber inaugurado al menos 40 edificios de la CSJ a nivel nacional.

"Pero hay insatisfacciones en aquello que no se pudo avanzar en la medida que del tiempo que hubiéramos querido, por la cuestión de la mora judicial que queda una cantidad de 35 mil casos de cerca de 200 mil que encontramos", dijo.

En cuanto a la elección de los nuevos magistrados de la CSJ, donde habían seis actuales magistrados que buscaban la reelección y que quedaron excluidos del proceso, indicó que la Junta Nominadora está haciendo el mejor trabajo y tomando las "decisiones más adecuadas para Honduras".

"Son las responsabilidades de los que integran la Junta Nominadora, ellos habrán explicado las decisiones sobre las tachas y denuncias que recibieron. Esa es una responsabilidad de ellos, yo no podría imputar circunstancias o hechos que no conozco", argumentó.

Asimismo, fue consultado sobre si hay temor de que cuando deje su cargo haya una casería en su contra a lo que respondió que "el mejor juez es la consciencia. Estamos tranquilos".

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