El Ejecutivo hondureño propone una Ley de Justicia Tributaria que incluye eliminar la mayoría de regímenes de exoneraciones, reformar el secreto bancaria y cambiar la renta territorial a mundial, entre otras.

Por su parte, la empresa privada recomienda ampliar la base tributaria para recaudar más ingresos y formalizar la economía. Asimismo, eliminar la Tasa de Seguridad, reducir el Impuesto Sobre Ventas (ISV) del 15 al 12 % y revisar los regímenes existentes para cerrar avenidas o abusos.

Ninguna de las propuestas es mala, pero se debe tomar una decisión con base a consensos, aseguró el expresidente del Colegio de Economistas de Honduras, Helmis Cárdenas.

"Tendría que tomarse cualquiera de esas decisiones en consenso en primer lugar, teniendo la participación clara de todos los sectores (...) pero definitivamente el diálogo es importante y siento que vez de acercarnos nos estamos polarizando más", declaró Cárdenas.

LEA: PN hizo 12 recomendaciones a la comisión de dictamen de la Ley de Justicia Tributaria

Entre tanto, el economista Melchor Rodríguez, consideró que hay muchos beneficios con la Ley de Justicia Tributaria porque se frenarán los abusos que han hecho algunos empresarios con las exoneraciones.

"Toda reforma en un inicio genera un impacto y estos pueden ser positivos o negativos, en este caso habrá un impacto negativo de un inicio. También se generará discusión por la pérdida de algunos empleos, porque al quitarme una exoneración tengo que volver a mis costos reales", explicó Rodríguez.

Finalmente, el economista y catedrático universitario Martín Barahona, asegura que tanto los que apoyan como los que se oponen a la Ley de Justicia Tributaria deben estar abiertos a replantear muchos aspectos.

"Pueden haber puntos de vista diferentes, todo se debe remitir a datos concretos, que permitan saber sin una afirmación, por ejemplo, si una empresa al cancelársele una exoneración va haber un impacto en el empleo, eso debe estar sujeto a una comprobación", puntualizó.

VEA: Economistas dicen que reducción del Impuesto sobre Ventas debe ser gradual