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La Policía Nacional ya tiene en la mira a los presuntos autores del asesinato de los tres policías suscitado el pasado 24 de abril en Trujillo, Colón, según el portavoz de la Secretaría de Seguridad, comisionado Miguel Martínez Madrid.
El funcionario manifestó a tunota.com que estos sospechosos están ligados a estructuras criminales vinculadas al narcotráfico.
"Se puede confirmar que se están identificando anticuerpos que están generando estas operaciones (delictivas) en la zona, que están siendo afectados (por las acciones policiales)", precisó Martínez Madrid.
Asimismo detalló que dichas personas se pronuncian contra la Operación Posmura-Guaimoreto, misma que inició tras el sangriento crimen contra los agentes, además buscan que se elimine el estado de excepción en Colón.
No obstante pese a la identificación de sospechosos, el comisionado indicó que hasta el momento no hay personas detenidas por este caso.
Incautación de drogas y armas
El portavoz de la Secretaría de Seguridad detalló que los operativos para ubicar a los responsables del crimen de los tres policías han dejado incautaciones de droga y armas de fuego.
"En Colón hay tres cosas que están relacionadas: las plantaciones de coca, armas ilegales y narcotráfico con estructuras criminales", mismas que estarían detrás del hecho que arrebató la vida de estos efectivos, acotó Martínez Madrid.
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Entre las acciones más recientes reportadas de la Policía Nacional en la Operación Posmura-Guaimoreto se encuentra la ubicación de 17 mil plantas de hoja de coca y dos viveros con 2 mil plántulas en el departamento mencionado.
Desde el inicio de dicha tarea también se han decomisado alrededor de 90 armas de fuego en Colón.
Crimen contra los tres policías
Los tres policías fueron acribillados el 24 de abril en una comunidad de Trujillo, Colón por al menos cuatros individuos con armas de uso prohibido, de acuerdo con los informes de la Policía Nacional.
Los ahora occisos respondían como Jairo Marcelino Posadas Ortiz, Juan Carlos Murillo Olivera y Jonathan Josué Ramos.
La información que se maneja apunta que los oficiales fueron atacados cuando estaban dando la vuelta en la patrulla policial en la que se trasladaban para regresar por su camino, tras realizar la inspección de un vehículo, tipo pick-up, color rojo que estaba abandonado en el lugar.
Las víctimas presentaban impactos de bala en distintas partes de su cuerpo, incluyendo su rostro, mientras que el vehículo oficial contaba con 57 perforaciones hechas con armas de fuego.
A partir de esa misma noche, la presidenta Xiomara Castro decretó un estado de excepción en el departamento de Colón regulando la circulación desde las 9:00 p.m.
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