“Vamos a tomar el toro por los cuernos. Lo principal es sanear todos los procesos que
han habido en la OABI y sacar adelante la administración de bienes”, expresa Rigoberto Portillo, integrante de la comisión interventora que fue juramentada el
15 de febrero pasado.

En un diálogo con tunota, Portillo asegura que ya tienen definido un plan de trabajo en la Oficina Administradora de Bienes Incautados (OABI) que incluye acciones inmediatas y a mediano plazo.

La revisión de los procesos es fundamental para retomar la seguridad y custodio adecuada de los bienes, sobre todo los inmuebles, indica.

“Ha habido un descuido y muchos bienes se han perdido. Algunos han sido saqueados porque no hay vigilancia.

Hay mucho temor de los dueños sobre cuál es el estado de los bienes”, apunta Portillo.

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'No vamos a tapar nada'

Por su parte, Hugo Suazo, viceministro de Seguridad e interventor, dice que están considerando lo bueno y lo malo que se hizo en la OABI.

“No venimos como comisión a tapar nada, venimos a buscar lo bueno y lo malo que se ha hecho. Lo malo que se hizo vamos a ponerlo en conocimiento del Ministerio Público, actuando conforme a derecho”, manifestó.

'Despilfarro'

Para el abogado Marlon Duarte, la intervención en la OABI es positiva, porque
se trata de una institución que despilfarró los bienes asegurados.

“La intervención es necesaria ante el latrocinio que se manejó en la institución, especialmente en la administración de Juan Orlando Hernández. En esa gestión vendían los bienes a precios exageradamente bajos. Los compradores
eran emisarios de funcionarios”, comenta a tunota.

Para Duarte es fácil identificar quiénes tienen los bienes. Considera que si pasaron a nombre del Estado está bien, pero se debe averiguar quién los compró, a qué precio y bajo qué parámetro.

"Si se logran conocer esos detalles, la intervención tendrá buenos resultados", señala.

'Vendieron ganado como carne para destajo'

“Se vendió ganado de alta genética como que fuera carne para destajo. Casas que valían L20 millones y no había inventario. Igual las camionetas Toyota Prado y Land Cruiser que aseguraron y se perdieron. Son L2,500 millones que no se sabe dónde están. La OABI fue la caja chica de la presidencial”, recalca Duarte.

La esperanza, según analistas, es que lleguen a fondo y que investiguen las matrículas en el Instituto de la Propiedad (IP).

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No dieron fondos al Gobierno en 2022

tunota consultó antes de la intervención sobre el destino de los fondos que maneja la
OABI y a qué dependencias se entregaron durante el 2022.

La respuesta que dieron a través del Instituto de Acceso a la Información Pública (IAIP) fue que “no se entregó dinero a ninguna institución del Gobierno, que no se recibió ninguna orden del Juzgado competente. No se giró orden para que se realizará el comiso sobre producto financiero y tampoco se hizo ninguna distribución anticipada de dinero”.