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Según un reciente reporte del Banco Central de Honduras(BCH), en los primeros siete meses de este año, Honduras alcanzó una deuda externa de $10,874.6 millones,
reflejando una baja de $10.1 millones en comparación con la que tuvo en el mismo período del año 2020.
El economista del Foro Social de la Deuda Externa de Honduras (Fosdeh), Obed García, refirió que no significa una baja en sí. “En efecto se ha visto que el crecimiento de la deuda externa se ha visto limitado en el punto de ir decreciendo. Esto quiere decir que los pagos de deuda que hemos hecho han sido mayores que los ingresos por endeudamiento público a nivel externo, pero esto no quiere decir que la deuda esté bajando”.
En tal sentido, García explicó las causas de esta disminución en la deuda externa de Honduras responden a las condiciones en las que se encuentra el país, lo que lo ha hecho menos accesible los compromisos, ya sea porque no son atractivos los bonos que ofrece el gobierno de Honduras o por la mala imagen que se ha transmitido. “No genera confianza en los inversionistas para que estos financien el endeudamiento hondureño con bonos soberanos”.
Aquí el riesgo, dijo, es que está absorbiendo la sobre liquidez del sistema financiero nacional a través de un mayor nivel de endeudamiento interno. Las tasas de interés son más altas y los períodos de pago más cortos. Por ello se genera una presión fuerte sobre las finanzas públicas.
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Recomendaciones
El economista recomendó algunas alternativas para que el peso de la deuda sea más leve. “En este momento es bastante difícil controlar el endeudamiento del país porque el 67% del producto interno bruto (PIB) ya está comprometido en el endeudamiento
público. Lo que se puede hacer es reestructurar el plan de pago que tiene Honduras con el exterior, o empezar a invertir estos recursos que se han obtenido en activos y
que generen un flujo financiero positivo suficiente para que el pago de la deuda no genere una presión tan fuerte en las finanzas públicas”, explicó.
