Los métodos comunes para presupuestar, implican la creación de categorías detalladas para ubicar porcentajes determinados de dinero en cada una. Debe hacer un seguimiento continuo y riguroso de sus gastos.

La regla 50-30-20 es una gran herramienta para aquellas personas que no quieren ser tan rigurosas a la hora de administrar su dinero o simplemente consideran que no tienen el tiempo para hacerlo, pero se preocupan por ello.

Solo requiere que realice un seguimiento y divida sus gastos en tres categorías principales: necesidades, deseos y ahorros/ deudas.

Necesidades

Son aquellas obligaciones que absolutamente debe pagar y son necesarias para tu subsistencia. Son aquellas cosas sin las que no podría vivir.

Estas incluyen: Vivienda (Alquiler, préstamo e hipoteca), alimentación, servicios públicos, transporte, salud, vestido.

La mitad de sus ingresos debe destinarse a cubrir sus necesidades y obligaciones básicas. Si está gastando más del 50% en sus necesidades, tendrá que reevaluar si está incluyendo algunas cosas que realmente no pertenecen a esta categoría o si está pagando más de lo que debería.

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Deseos

La regla 50-30-20 estipula que debe destinar 30% de su ingreso en esta categoría. Los deseos son todas las cosas en las que gasta dinero, pero no son absolutamente esenciales: Vacaciones, entretenimiento (Cine, comidas fuera de casa, conciertos,
fiestas, eventos), hobbies (dinero que gastes en deportes o actividades extras que practiques), tecnología (un teléfono/ laptop/tablet/TV/ nuevo, carro, entre otros).

También, suscripciones (gimnasios, servicios de streaming como Netflix, revistas, etcétera). Recuerda que todo lo que esté en esta categoría es opcional.

Puede hacer ejercicio en casa en lugar de ir al gimnasio, cocinar en lugar de salir a comer o ver deportes en TV.

Ahorros/deudas

Como su nombre lo indica Ahorros/deudas cubre dos áreas principales. En primera instancia, esta categoría está destinada al ahorro de dinero para inversión, a la creación de un fondo de emergencia (tres meses de ingresos) y contribuciones a pensión. Por último, el dinero que incluya debe destinarse al pago de deudas.

El único tipo de deuda que debe incluirse es aquella que sobrepasa los pagos mínimos de sus obligaciones financieras. Es decir, los pagos adicionales para pagar más rápido su tarjeta de crédito o la hipoteca. Todos los pagos mínimos fijos mensuales que tenga deben incluirse en la categoría “Necesidades”.

El motivo de este razonamiento es que los pagos mínimos requeridos son obligatorios. No cumplir causaría efectos adversos en su estado crediticio.

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