De 72.6 millones de lempiras es el aumento del techo de gastos para la campaña en el nivel presidencial para las elecciones primarias de 2021 en relación con el límite fijado en los comicios primarios de 2017.

El Consejo Nacional Electoral (CNE) cifró en L542.2 millones el máximo que un precandidato presidencial puede erogar en promover su postulación, mientras que en 2017 fue de 469.6 millones, lo que representa un incremento de 15%.

Los nuevos límites de los gastos se encuentran establecidos en el acuerdo 04-2020 del CNA publicado en el diario oficial La Gaceta el 25 de septiembre de 2020. En el mismo acuerdo se regulan las erogaciones máximas permitidas para proselitismo para los niveles de precandidatura de diputados y alcaldes.

Por ejemplo, un precandidato a diputados por Francisco Morazán tiene un techo de L4.3 millones versus L3.7 millones de 2017. En el caso de Cortés, el valor pasa de L4.2 millones a L4.9 millones.

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El CNE convocó a los partidos políticos a las elecciones primarias del 14 de marzo de 2021, de donde saldrán los candidatos para las elecciones generales del 28 de noviembre de ese año.

¿CÓMO SE CALCULA?

El techo para los gastos de campaña para precandidatos presidenciales (gasto individual) se obtiene al multiplicar el número de ciudadanos inscritos en el Censo Nacional Electoral por el doble del valor del voto que defina ese organismo, de acuerdo al artículo 15 de la Ley de Financiamiento, Transparencia y Fiscalización a Partidos Políticos y Candidatos.

El Censo Nacional Electoral actual tiene registradas 6,220,249 personas, número que al multiplicarlo por 87.59 lempiras (el doble de 43.75 lempiras, costo del voto) da como resultado 544,271.787.50 lempiras de límite para precandidato presidencial.

El Congreso Nacional aprobó una reforma a la Ley Electoral que permite a la Unidad de Financiamiento, Transparencia, Fiscalización a Partidos Políticos y Candidatos o Unidad (conocida como Unidad de Política Limpia) hacer una auditoría de los fondos de campaña que se hagan en elecciones primarias.

Esa norma solo establecía las fiscalizaciones para proselitismo en las votaciones generales.

“Nosotros como unidad monitoreamos y fiscalizamos el financiamiento de las campañas, o sea, el origen del dinero, de dónde los candidatos y los partidos políticos como sujetos obligados de la ley obtiene el financiamiento”, dijo Javier Franco, comisionado de la Unidad de Política Limpia.

En las elecciones generales de 2018, los candidatos gastaron en suma casi L900 millones.

Los tres partidos mayoritarios (Partido Liberal, Partido Nacional y el Partido Libertad y Refundación) tienen unos 10 movimientos para participar en los comicios primarios. Los otros 11 partidos minoritarios van a elegir a sus candidatos en asambleas.

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