"Las condiciones de El Niño se han desarrollado, ya que la respuesta atmosférica a la superficie del mar Pacífico tropical son más cálida que el promedio, se activó durante el mes pasado (mayo)", indicó la NOAA.

La organización meteorológica prevé que El Niño "continúe en el invierno, y las probabilidades de que se convierta en un evento fuerte en su apogeo son bastante buenas, con un 56 %. Las posibilidades de al menos un evento moderado son de alrededor del 84%".

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De igual forma, la NOAA explicó que El Niño es la fase cálida del patrón climático de El Niño-La Niña, ambos fenómenos influyen en el comportamiento climático del planeta.

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Más calor

En mayo, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) previó que el período 2023 2027 sería el más caluroso jamás registrado en la Tierra, bajo el efecto combinado de El Niño y el calentamiento global provocado por las emisiones de gases de efecto invernadero.

El fenómeno contrario, La Niña, que por el contrario tiende a provocar un descenso de las temperaturas, ha llegado hace tres años.

En general, El Niño tiende a moderar la actividad de huracanes en el Atlántico, pero los favorece en el Pacífico, según la NOAA.

Australia advirtió esta semana que El Niño aumentará las temperaturas en un país ya de por sí vulnerable a incendios forestales.

La influencia del fenómeno en Estados Unidos es débil durante el verano, pero más pronunciada desde fines del otoño hasta la primavera, afirma la NOAA en su comunicado.

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