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La historia de Lucía, Francisco y Jacinta, los pastores que afirmaron haber visto a la Virgen de Fátima en 1917, es una de las historias más fascinantes y conmovedoras de la devoción católica.
Los tres niños eran originarios de la localidad portuguesa de Aljustrel, cerca de Fátima, y pertenecían a familias humildes y trabajadoras. En mayo de 1917, mientras pastoreaban sus ovejas en la Cova da Iria, un lugar apartado cerca de Fátima, los tres niños afirmaron haber visto a una "señora vestida de blanco" que les pidió que regresaran a ese lugar el día 13 de cada mes durante los próximos seis meses.
A partir de ese momento, los niños experimentaron una serie de visiones y apariciones de la Virgen María en la Cova da Iria, en las que les pidió que rezaran el rosario todos los días y que hicieran sacrificios por la conversión de los pecadores y la paz en el mundo. También les reveló tres secretos, que fueron posteriormente revelados por Lucía.
Las apariciones de la Virgen María tuvieron un gran impacto en la vida de los tres niños. Lucía, la mayor de los tres, se convirtió en una monja carmelita y dedicó su vida a la oración y la contemplación, escribiendo varios libros sobre su experiencia.
Francisco y Jacinta murieron poco después de las apariciones, a causa de la pandemia de la gripe española de 1918, pero fueron canonizados por el Papa Francisco en 2017, convirtiéndose en los santos más jóvenes no mártires de la Iglesia Católica.
¿Qué se le pide a La Virgen de Fátima?
La Virgen de Fátima es una advocación mariana muy querida y venerada por los católicos de todo el mundo. Como madre espiritual y protectora, se le pide ayuda en una amplia variedad de asuntos, entre los que se encuentran los siguientes:
- Paz en el mundo: La Virgen de Fátima es conocida por haber pedido a los tres niños pastores que rezaran por la paz en el mundo. Por esta razón, muchos católicos le piden su intercesión para que haya paz en el mundo y para que se resuelvan los conflictos y las tensiones que afectan a las personas y a las naciones.
- Conversión de los pecadores: En sus apariciones, la Virgen de Fátima pidió a los niños que hicieran sacrificios por la conversión de los pecadores. Por lo tanto, muchos católicos le piden su intercesión para que los pecadores se arrepientan de sus errores y se conviertan a Dios.
- Protección de la familia: La Virgen de Fátima es también considerada como la protectora de la familia. Por esta razón, muchos católicos le piden su intercesión para que las familias estén unidas y protegidas de las dificultades y los peligros que puedan afectarlas.
- Sanación de enfermedades: Muchos católicos acuden a la Virgen de Fátima en busca de su ayuda para sanar enfermedades físicas y mentales. La devoción a la Virgen de Fátima incluye la creencia en la intercesión divina, por lo que muchos creen que ella puede ayudar a sanar a las personas.
- Resolución de problemas personales y familiares: La Virgen de Fátima es también invocada por aquellos que buscan su ayuda para resolver problemas personales y familiares. Se le pide que interceda para que se resuelvan conflictos, se tomen buenas decisiones y se alcancen las metas deseadas.
Oración de la Virgen de Fátima
Oh Virgen Santísima, que te apareciste varias veces a los niños; yo también quisiera verte, oír tu voz
Y decir: Madre mía, llévame al Cielo.
Confiando en tu amor, te pido me alcances de tu Hijo Jesús una fe viva, inteligencia para conocerle y amarle, paciencia y gracia para servirle a Él a mis hermanos, y un día poder unirme contigo en el Paraíso Celestial.
Te pido como favor especial por la conversión de los pecadores y la paz del mundo; por los niños, para que nunca les falten los auxilios divinos y lo necesario para sus cuerpos; y un día conseguir la vida eterna.
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